La Intendencia de Maldonado informó que con el sorteo de 17 soluciones habitacionales, ya se logró el realojo del 90% de las familias afincadas en San Antonio II, muchas de las cuales han vivido en la franja de servidumbre de líneas de alta tensión de UTE.

Este martes fueron sorteadas 17 soluciones habitacionales entre las familias que residen debajo de las líneas de alta tensión de UTE en el barrio San Antonio II, en el marco de la tercera etapa del proceso de realojo iniciado por la Intendencia de Maldonado en el año 2015.

Con el sorteo efectuado, la administración alcanzó el 90% de los realojos correspondiente a este asentamiento, uno de los más antiguos de la capital departamental. Los 17 beneficiarios pasarán a residir en viviendas ubicadas en el barrio 14 de Febrero.

El director general de Vivienda, Desarrollo Barrial y Salud de la Intendencia de Maldonado, Alejandro Lussich, informó que “restan cinco familias que serán trasladadas en los primeros meses del año 2018” para dar por finalizado este proceso.

Una de las beneficiarias, Daysi Correa, expresó que “es un cambio de vida muy grande, es un lugar hermoso y las viviendas son preciosas”. Por su parte, Lussich, agregó que “es una satisfacción que estos vecinos tengan una mejor calidad de vida”, a partir de ahora.

Estos realojos forman parte de un convenio entre la actual administración departamental y el  Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente (Mvotma). En total son 57 familias las que están comprendidas dentro de este plan de realojo.

Larga data

En julio de 2014, la Intendencia de Maldonado suscribió un convenio con el Mvotma para la reubicación de las 53 familias del San Antonio II. El gobierno nacional aportó fondos para la construcción de las viviendas, en terrenos cedidos por la comuna que, además, se encargó de la licitación.

El convenio se enmarcó en un plan de relocalización de asentados en terrenos inundables o contaminados. El asentamiento San Antonio II, se ubica en el denominado callejón de UTE, predio por el que atraviesan líneas de trasmisión de energía eléctrica de 150kv.

El proyecto, incluyó una propuesta de recuperación del predio liberado para uso público, de manera de evitar nuevas ocupaciones con fines habitacionales, y un cronograma para la demolición de las viviendas y la mejora de los espacios públicos.