A lo largo de distintos gobiernos nacionales y departamentales se han puesto los ojos en el puerto de Piriápolis como el sitio ideal para construir una terminal de cruceros, por sus características naturales y por su ubicación, muy próxima a Punta del Este y también cercana a Montevideo.
En las últimas horas, desde la Intendencia de Maldonado se informó que mientras se avanza en los estudios para determinar la viabilidad de un puerto de cruceros en Piriápolis, según el intendente (i) Juan Pígola, el objetivo es avanzar en esa dirección durante el actual periodo de gobierno.
Desde hace al menos quince años se habla de esa posibilidad, pero se trata de una obra que requeriría de una infraestructura muy importante y de una inmensa inversión, que, no se habla quien podría realizarla, en una zona ideal por la profundidad natural de ese punto de la costa rioplatense.
Pígola reconoció que se trata de “una obra de largo aliento que en algún momento hay que empezar a realizarla”, agregando que “el turismo de cruceros genera una propuesta departamental interesante a la cual hay que darle una mayor cantidad de alternativas”, como la posibilidad de esos buques de atracar a muro.
“Cuando un departamento crece, se van marcando necesidades y se están buscando análisis de factibilidad”, dijo, al tiempo de admitir que “también requerirá de estacionamientos, mejoramientos en general, de circulación y otros aspectos que tienen que acompañar y son parte de una realidad”.
Largo anhelo
Ya en abril del año 2008, el entonces ministro de Transporte y Obras Públicas, Víctor Rossi, le señalaba al matutino La República que el puerto de Piriápolis podría transformarse en una terminal de cruceros como no existía en ese momento en nuestro país, y aún hoy sigue siendo inexistente.
Rossi reconoció que en el principal balneario uruguayo (Punta del Este) no se logró avanzar en un acuerdo para lograr una terminal de cruceros, ya que incluso en un mega megaproyecto para Piedras del Chileno que estaba en fase de estudio, se descartaba esa posibilidad “por razones estéticas”.
“En el Uruguay estamos atendiendo mal a los cruceros. Es decir, llegan los pasajeros, con mucho gusto los recibimos por algunas horas, pero no hay ninguna terminal que permita que se hagan los relevos de tripulación y que se habilite la posibilidad de que baje el 100% de los pasajeros”, apuntaba.
En marzo de 2015, Enrique Antía ocupando una banca en la Cámara Baja y siendo candidato a la Intendencia de Maldonado, se reunió con Rossi que nuevamente estaba al frente de la cartera de Transporte y Obras Públicas, para abordar varios temas, entre ellos lo vinculado al puerto de cruceros en Piriápolis.
Antía planteó esa posibilidad como alternativa para descongestionar la llegada de este tipo de buques turísticos al puerto de Montevideo, y para que los pasajeros bajen a tierra en un puerto especializado y no entre contenedores, organizando excursiones hacia los distintos destinos.
En abril de 2013, el entonces director nacional de Hidrografía, Jorge Camaño, al anunciar que estaba en marcha el proceso de licitación para nuevas obras en el puerto de Piriápolis, que demandarían una inversión cercana a los US$ 20 millones, dijo que se construiría un muelle para pequeños cruceros.
Se proyectó que en el extremo de la escollera principal se habilitara un muelle de 80 metros. Camaño aclaró en aquel momento que “no serían los cruceros que vemos en la bahía de Maldonado que tienen entre 200 y 300 metros de eslora”, sino “cruceros de nicho, que son más pequeños…”.
Más cerca en el tiempo, en diciembre del año pasado, el intendente Enrique Antía aseguró que no solo los operadores, sino que él mismo es el primero en opinar que el destino para un puerto de cruceros en nuestro país debería ser Piriápolis, y hasta arriesgo una opinión que, puede ser discutida.
El jefe comunal aseguró que “con muy poca inversión se puede convertir en un lugar de atraque para dos cruceros en forma simultánea, lo que se vería reflejado en una noche más para el turismo”, ya que “un tercio de los que vienen a bordo se quedan en el lugar a pernoctar y el resto conocen otros destinos cercanos”.
Recordó que cuando se inauguró el muelle de La Pastora en Punta del Este (operado por la compañía MSC), analizó este tema con expertos en la materia y todos opinaron que el mejor lugar sería Piriápolis, y exhortó al gobierno a realizar una inversión pequeña que generará un desarrollo para todo el departamento.
