En total son unas 120 hectáreas delimitadas al Este y Sureste por el arroyo El Potrero, al Sur por el Río De la Plata, al Oeste por Ocean Park, y al Norte por la Ruta Interbalnearia. Comprende los predios vendidos hace mucho tiempo por el Banco de Seguros del Estado y más recientemente otro del Ministerio de Transporte y Obras Públicas.

El proyecto “Reserva del Mar”, del estudio Gómez Platero se pretende desarrollar en los padrones rurales 31.394, 31.395, 32.165 y 31.896 de esa zona lindera a Chihuahua (al Este) y a Ocean Park (al Oeste), sobre unas 120 hectáreas delimitadas por el arroyo El Potrero, el Río De la Plata, Ocean Park, y la Ruta Interbalnearia.

Sobre la madrugada del miércoles 18 de septiembre del año pasado, la Junta Departamental de Maldonado -solo con los 21 votos del Partido Nacional y el del Partido Colorado-, aprobó el Expediente Nº 332/2024 vinculado al desarrollo de este barrio privado junto al balneario Ocean Park.

A lo largo de la noche se generó un intenso intercambio entre ediles del oficialismo que nuevamente defendieron las excepciones que finalmente se otorgarían, por el desarrollo de la zona y en las fuentes de trabajo que se generarán, y los curules frenteamplistas que se ampararon en aspectos básicamente vinculados al medio ambiente.

En ese momento ya había varias organizaciones de la zona que estaban rechazando la instalación de un muro perimetral de troncos que empezaba a delimitar el predio privado del público, incluyendo un tramo sobre la costa que, se insistía era violatorio de la normativa que prevé un retiro determinado de la zona de dunas.

La obra en su totalidad, se encuentra detenida desde noviembre del año pasado, cuando tras una catarata de denuncias y reclamos la Dirección Nacional de Calidad y Evaluación Ambiental (Dinacea) del Ministerio de Ambiente (MA) clasificó en la Categoría B al proyecto de fraccionamiento que promueve el fideicomiso Overtrust SAS.

De acuerdo a los últimos datos obtenidos por MaldonadoNoticias, los inversores recurrieron la decisión del MA pero no hubo marcha atrás. Empero, el proyecto original aprobado por la Junta Departamental, habría sufrido sustanciales modificaciones, porque además hubo reclamos de la firma concesionaria del aeropuerto de Laguna del Sauce.

El barrio privado, entre otras cosas, preveía la construcción de 12 bloques de cuatro pisos de altura, lo que puso en alerta a las autoridades de la terminal aérea, por la incidencia que podría llegar a tener un desarrollo de ese tipo en el área de acercamiento a la pista 0119 que tiene una de sus cabeceras a unos 100 metros de Ruta Interbalnearia.

Las organizaciones de la zona que realizaron los reclamos, están haciendo un seguimiento constante de los trámites que deben cumplir los inversores y están a la espera contactos más directos con las nuevas autoridades de al menos dos ministerios involucrados: el de Ambiente y el de Transporte y Obras Públicas.

La Categoría B calificada por la Dinacea, considera que el desarrollo inmobiliario “puede tener impactos significativos moderados, cuyos efectos pueden ser minimizados o eliminados”, de acuerdo al artículo 5 del Reglamento de Evaluación de Impacto Ambiental, por lo tanto los promotores debían presentar varios estudios.

Uno es la Autorización Ambiental Previa, y otro el Informe Ambiental Resumen. La resolución de la Dinacea fue notificada en octubre de 2024 a la Intendencia de Maldonado (IDM), la Junta Departamental, el Municipio de Piriápolis, la Prefectura Nacional Naval y la Comisión del Patrimonio Cultural de la Nación.