La presidenta de la Sociedad de Hemoterapia del Uruguay, aseguró que en nuestro país se necesitarían muchos más donantes de los que hay hoy, por lo cual no se puede hablar de “descarte” porque siempre falta. Afirmó que la sangre pasa a ser un bien público que bajo ningún concepto se comercializa, y explicó los costos de su procesamiento.
La doctora Estela Lavalle, presidenta de la Sociedad de Hemoterapia del Uruguay, explicó que en nuestro país hay una red para potenciar la donación de sangre y a su vez lograr que las transfusiones se realicen en forma coordinada. “Somos pioneros en tener normativa para esto”, afirmó.
La profesional explicó que precisamente a partir de esa red, es que se produce un permanente “intercambio” para evitar la pérdida de sangre y al mismo tiempo dosificar los recursos de la mejor manera posible, ya que no se ha llegado aún a la cifra ideal de donantes a nivel país.
La doctora Lavalle, fue entrevistada en el periodístico Frecuencia Abierta de Aspen FM de Punta del Este, sobre éste tema, a partir de las interrogantes surgidas por la controversia generada por el coordinador de la Hemored de ASSE, en su enfrentamiento con el Hemocentro de Maldonado.
Respecto a las campañas para captar donantes, se expresó radicalmente opuesta al doctor Ismael Rodríguez, quien criticó que en el Este se estén recolectando 17.000 unidades cuando en realidad se necesitarían solamente unas 7.000. La doctora Lavalle dijo que el país necesitaría unas 140.000 unidades anuales.
Por otra parte, subrayó que cuando la sangre fue donada, pasa a ser “un bien público” que ya no pertenece ni a organismos estatales ni a instituciones privadas, por lo cual ante cualquier necesidad, se traslada rápidamente al punto el país donde se la esté necesitando.
Sostuvo que, asegurar que en determinada zona del país se logran más donaciones que en otra lo que determina desperdiciar o tirar la sangre, va contra cualquier plan no solo en Uruguay sino en el resto del mundo, donde el manejo de la sangre se hace mediante intercambios y a través de redes.
Aclaró además que, la sangre tiene un vencimiento en todas partes del mundo, y que en ocasiones se deben realizar descartes, pero afirmó que en Uruguay el porcentaje es muy bajo. La sangre tiene una vigencia de 42 días conservada en equipos para esos efectos.
Por otra parte, aclaró que hay registros muy rigurosos donde se conocen mensualmente todas las actividades que se realizan, y que para concretar descartes hay distintos parámetros, también manejados a nivel internacional para hacerlo cuando es inevitable.
No se vende
Consultada sobre las afirmaciones de Ismael Rodríguez Grecco, respecto a que en el Hemocentro de Maldonado “le venden” sangre a distintas mutualistas, si bien no respondió directamente, aclaró que, “la sangre no es de Curbelo (el director técnico del Hemocentro Regional de Maldonado)”.
Además, reiteró que “no se paga ni se vende” porque eso configura un delito muy grave, aunque acotó y explicó claramente, que a partir de la extracción se generan distintos costos por todo el proceso de producción de la sangre que llegará finalmente a quien la necesite ofreciendo todas las garantías.
La doctora Estela Lavalle, dijo que hay información tergiversada cuando se habla de venta de sangre, ya que no se explica claramente que lo que si se cobra “son los costos de producción” generados por distintos conceptos, que van desde el propio material que se usa al traslado de la sangre.
Agregó que esos costos de producción también son variables dependiendo incluso de la “cantidad de unidades que se procesen”, ya que cada una necesita pasar por una serie de procesos y controles, por lo que a mayor cantidad de donantes más bajos pueden ser esos costos.
Solo como ejemplo, dijo que como promedio cada volumen le puede costar entre 70 y 80 dólares a la institución que requiera sangre para transfundir, pero insistió que puede variar dependiendo de una serie de factores que tienen que ver con el proceso que garantiza la calidad y tipo de la misma.
Finalmente, la presidenta de la Sociedad de Hemoterapia del Uruguay, destacó muy especialmente a los donantes de sangre, porque en estos tiempos, “es destacable que haya gente con la voluntad de prestar su brazo (para donar), y eso es maravilloso”.