Un joven de 23 años poseedor de antecedentes penales, acompañado por su pareja y un niño, aprovechó un descuido del dueño de un parador de balneario Las Flores, y le robó dinero de la caja registradora. El hombre se dio cuenta, llamó a la Policía, el ladrón fue detenido y luego enviado a prisión.
Jairo Edgardo López Etcheverry, de 23 años de edad, fue remitido a la cárcel de Las Rosas imputado por la Jueza Penal (s) de 4° Turno, por la presunta comisión de un delito de hurto en grado de tentativa.
Días atrás, el dueño de un parador de balneario Las Flores, llamó al servicio de emergencias 911 pidiendo presencia policial en su comercio, asegurando que poco antes un cliente le había robado dinero de la caja registradora.
Cuando arribaron efectivos policiales del Distrito 1, fueron informados por el denunciante, que en determinado momento había descuidado la caja registradora mientras atendía a otros clientes, y López Etcheverry lo había robado.
En el lugar aún se encontraba el acusado junto a su pareja y un niño, negando enfáticamente haber tomado el dinero de la caja. Sin embargo, al ser revisado tenía consigo treinta billetes de $ 100 pesos, el faltante denunciado.
Trasladado detenido a dependencias de Investigaciones en Estación Las Flores, fue interrogado y luego quedó a disposición del Juzgado de Paz de la 5ª Sección, de donde se informó a la Justicia Penal que luego determinó su encarcelamiento.
En su casa
A todo esto, el Juez Penal de 2° Turno, dispuso el procesamiento sin prisión de J.E.N.T., de 19 años de edad, imputado por la presunta comisión de un delito de hurto especialmente agravado, imponiéndole como medida sustitutiva el arresto domiciliario nocturno, por 30 días.
El joven fue autor de un hurto cometido el 7 de julio de 2016 en un comercio de calle Gregorio Sanabria, en Piriápolis, del que se llevaron 19 damajuanas de vino, 2 casilleros de envases de 2 litros, 5 botellas de refrescos, 3 fundas de 2 litros y 2 fundas de 600 c.c. de refrescos.
En forma inmediata concurrió al lugar personal de la URPM del Distrito 1, que avistó a dos individuos: uno trepado al tejido perimetral del comercio y el otro dentro del predio alcanzándole la mercadería. Se trataba J.E.N.T. y un adolescente de 17 años, quienes fueron detenidos.
Derivados a la seccional policial 11ª de Piriápolis (junto con todo el botín que pudo ser recuperado), comparecieron ante la Justicia competente pero en aquel momento recuperaron la libertad. Días atrás, J.E.N.T. fue citado por el titular de la sede Penal de 2° Turno, que determinó su procesamiento.