Dos individuos fueron atrapados mientras robaban una casa de comidas en la ciudad de San Carlos. Inexplicablemente uno de ellos recuperó la libertad sin otras consecuencias, en tanto el otro fue condenado a 30 días de arresto domiciliario nocturno.

El Juez Penal de 2° Turno de San Carlos, formalizó la investigación de Diego Eduardo Fontana Gil, de 34 años, por la presunta autoría de un delito de hurto agravado en grado de tentativa; deberá cumplir arresto domiciliario nocturno por 30 días y someterse a tratamiento psiquiátrico por el mismo lapso.

El sujeto, fue atrapado en horas de la madrugada del jueves último, cuando la Policía de San Carlos se trasladó hacia un local de comidas sito en calles 25 de Agosto y Agustín Abreu. Los efectivos constataron daños en una ventana y la presencia de intrusos en el interior.

Los policías exigieron a los dos desconocidos que salieran del local, resultando ser Fontana Gil junto y otro joven de 18 años. Ambos fueron inmediatamente detenidos y trasladados a dependencias policiales, desde donde se informó de lo actuado a Fiscalía.

Posteriormente, la Fiscal de turno dispuso el cese de la detención del joven de 18 años, y la comparecencia de Diego Eduardo Fontana Gil en la sede penal donde fue condenado como se menciona. No se informó las razones por las cuales el otro sujeto quedó en plena libertad.

No es nuevo

El 1° de febrero de este año, este individuo, que es poseedor de varios antecedentes penales, fue formalizado por el mismo Juez Penal, por la presunta comisión de los delitos de atentado agravado en régimen de reiteración real y lesiones personales.

Sobre la hora 13.00 del miércoles 31 de enero, personal policial que realizaba tareas de patrullaje a la altura de calle Tomás Berreta, entre Maldonado y Juan de Dios Curbelo, en San Carlos, fue amenazado por un grupo de personas, una de las cuales estaba armada.

Un individuo portaba dos elementos cortopunzantes de fabricación casera, por lo cual se pidió apoyo concurriendo otro móvil, aunque se les ordenó retirarse del lugar para evitar incidentes. Poco después, desde la misma dirección una mujer pidió auxilio a la Policía.

Dijo haber sido agredida por quien luego sería identificado como Diego Eduardo Fontana Gil, en momentos que iba a buscar a sus dos sobrinas que son hijas del violento sujeto. Enterada la Fiscalía, ordenó el allanamiento de la casa del individuo y su detención.

La Policía realizó un cuidadoso procedimiento, logrando detener a Fontana Gil así como a una mujer que se encontraba con él, la que fue derivada al hospital Alvariza para su asistencia. El individuo en tanto fue acusado por la autoría de los dos delitos mencionados, aunque no se conoció la condena.