Poseedores ambos de antecedentes penales, fueron prontamente atrapados por la Policía y sometidos a la Justicia competente, que los condenó a 19 meses de prisión efectiva por dos delitos de hurto especialmente agravados, en reiteración real.
Los hechos, que terminaron con dos sujetos enviados a la cárcel, ocurrieron días atrás en un corto periodo de tiempo. El dúo, robó una moto en la Parada 16 de la rambla Claudio Williman de Punta del Este, zona donde hay una amplia cobertura de cámaras de video vigilancia.
Pocos minutos después, cuando los delincuentes huían hacia Maldonado Nuevo, vieron la oportunidad de arrebatarle la cartera a una mujer en avenida Roosevelt. La Policía se movilizó rápidamente en procura de dar con los autores de ambos hechos, que ya estaban claramente identificados.
Tras varios procedimientos sin resultados positivos, sobre la hora 1.00 del miércoles, personal de Investigaciones del Distrito 2 que circulaba a la altura de calles Matheo Moleras y Los Caciques, capturó a Cristian Daniel Álvarez Olivera, hermano del narco apodado “El Tommy”.
Horas más tarde, policías de esa repartición apoyados por el grupo PADO y la URPM, concretaron 7 allanamientos en distintas fincas del barrio Maldonado Nuevo, en procura de Diego Gastón Alvira Betbeder, quien fue atrapado en una finca de calle Matheo Moleras y avenida De los Gauchos.
En las últimas horas de este jueves, Cristian Daniel Álvarez Olivera y Diego Gastón Alvira Betbeder, ambos de 30 años, fueron condenados a 19 meses de prisión efectiva, como autores penalmente responsables de dos delitos de hurto especialmente agravados, en reiteración real.
No son santos
El miércoles 21 de agosto del año pasado, Diego Gastón Alvira Betbeder fue condenado a un año de prisión, por un delito de porte y tenencia de arma de fuego en lugares públicos, con un delito de porte de arma de fuego por reincidente, un delito de tráfico interno de arma de fuego y municiones, y un delito de receptación.
En horas de la tarde del día anterior, efectivos policiales desataron una persecución en el barrio Maldonado Nuevo -donde se habían producido varios hechos violentos en aquellos días-, para intentar identificar a dos hombres que circulaban en una moto y eludieron un control.
En su huida ingresaron en una pensión ubicada en avenida De los Gauchos y calle Matheo Moleras. Con la debida autorización, los efectivos ingresaron a la propiedad, logrando detener a Alvira Betbeder mientras se escondía en un baño intentando descartarse de un revolver y varios proyectiles.
Su compinche logró eludir el cerco policial escapando por los techos de las casas linderas, y perdiendo por el camino una pistola. Luego se comprobó que el arma incautada a Alvira Betbeder había sido robada el año 2013 y la moto que ocupaba el dúo, hurtada en julio del año pasado.
Anteriormente, a mediados de abril del 2018, una investigación de la Policía de Maldonado terminó en el desbaratamiento de una boca de venta de drogas, donde no solo se incautaron estupefacientes, sino un arma de fuego, un chaleco antibalas, dinero y una serie de efectos robados.
La Justicia de Maldonado extendió dos órdenes de allanamiento para fincas de los barrios Cerro Pelado y San Antonio, donde se presumía había venta de drogas y acopio de distintos efectos de dudosa procedencia. Uno de los operativos arrojó resultados positivos.
En la casa ubicada en calle Atanasio Sierra, a media cuadra de Alberto Caracara, detrás de la conocida como “reductora de Ute”, se incautó una pistola 9m.m. y 17 proyectiles vivos, un chaleco antibalas; $ 11.498 y US$ 100, dos teléfonos celulares y 21 dosis de pasta base.
En la ocasión, fue detenido Diego Gastón Betbeder, quien terminó condenado a 8 meses de prisión efectiva, como autor de un delito de receptación, en concurrencia fuera de la reiteración, con un delito de porte de arma por reincidente. Junto a él había sido detenido otro sujeto y una mujer.
En tanto, Cristian Daniel Álvarez Olivera registra un antecedente de abril de 2011, cuando tenía 20 años y fue atrapado durante un operativo que desbarató una banda que vendía drogas a cambio de todo tipo de efectos robados. Fue a la cárcel por un delito de rapiña especialmente agravada.
Además, el 19 de abril de 2015 fue condenado por un delito de auto evasión y un delito de hurto especialmente agravado por la penetración domiciliaria, y el 27 de febrero de 2018, cuando fue enviado a la cárcel como autor de dos delitos de hurto agravado en reiteración real.