Ambos casos ocurrieron la madrugada del viernes de la pasada semana, cuando fue observado un hombre intentando abrir coches estacionados en Maldonado, hasta que logró ingresar a uno; y en otro caso, a cuatro jóvenes a bordo de una moto que resultó ser robada.
En horas de la madrugada del viernes 12 de agosto, visualizadores del Centro de Comando Unificado (CCU), avistaron en calle Ituzaingó de Maldonado, a un hombre que a su paso iba intentando abrir los coches estacionados, hasta que logró ingresar a uno de ellos.
En forma inmediata se radió el aviso a las patrullas que se encontraban en las calles, concurriendo al lugar un móviles de la URPM de Zona 2 y de la seccional 1ª, logrando la detención del individuo dentro de uno de los automóviles. Se trataba de M.A.M.R, de 42 años.
Mientras el sujeto -poseedor de antecedentes penales- fue trasladado a dependencias policiales, se dio cuenta de lo actuado a la fiscalía de 4° turno que ordenó una serie de actuaciones y la comparecencia del detenido, al día siguiente, ante la Justicia.
Cumplida la audiencia en la sede penal de 11° turno, M.A.M.R. fue formalizado como presunto autor de un delito de hurto especialmente agravado, en grado de tentativa. Como medida cautelar, se dispuso su arresto domiciliario por 120 días excepto de 9.00 a 20.00 horas por motivos laborales.
Moto ajena
También la madrugada del mismo día, visualizadores del CCU hicieron el seguimiento de una moto ocupada por 4 personas, que circuló desde la rambla Claudio Williman en dirección a la Torre del Vigía, en el centro de Maldonado, en actitud sospechosa.
Los ocupantes, al notar la cercana presencia de un móvil policial, emprendieron la fuga aunque poco después pudo ser detenido quien la conducía, tratándose de N.A.G.M., de 18 años; minutos después, se confirmaba que el birrodado tenía denuncia por hurto del 16 de julio, del centro fernandino.
Cumplidas otras actuaciones a cargo de la fiscalía de 4° turno, N.A.G.M. compareció en el juzgado penal de 11° turno donde se dispuso su condena como autor de un delito de receptación, ya que no admitió y no se obtuvieron pruebas de que él haya robado la moto.
La pena impuesta es de 6 meses de libertad a prueba, tiempo durante el cual tendrá que cumplir tareas comunitarias dos horas por semana y presentarse una vez por semana ante la Policía. Además, los dos primeros meses deberá guardar arresto entre las 22.00 y las 6.00 del día siguiente.