Fueron detenidos durante un operativo que se realizaba a comienzos de esta semana en calles del barrio Cerro Pelado de Maldonado. Al ser revisados llevaban distintas cantidades de clorhidrato de cocaína.
Durante un operativo de saturación desplegado el lunes 3 de octubre por la Policía de Maldonado en el barrio Cerro Pelado, con participación de personal de la URPM y del grupo PADO de Zona 2, a la altura de calles Cerro Arequita y Cuchilla del Cuareim fueron intervenidos dos hombres.
Se trataba de dos sujetos poseedores de varios antecedentes, identificados como Alejandro Nicolás Arias Maciel, de 21 años, y Miguel Ángel Rivero Abreu, de 39, quienes al ser revisados guardaban distintas cantidades de droga que no fue considerada para consumo propio.
Arias Maciel llevaba consigo 26 lágrimas de clorhidrato de cocaína y $ 420 en billetes y monedas de baja denominación -típico de la recaudación por la venta de drogas-, en tanto que Rivero Abreu tenía otras dos dosis de la misma droga así como $ 700, por lo cual quedaron detenidos.
Tras ser interrogados y por disposición de la fiscalía de 4° turno, Alejandro Nicolás Arias Maciel y Miguel Ángel Rivero Abreu comparecieron en el juzgado penal de 4° turno donde los formalizaron como presuntos autores de un delito continuado de suministro de estupefacientes. Cumplen prisión preventiva por 150 días.
Non sanctos
En el caso de Arias Maciel, cuenta con su último antecedente del 31 de agosto del año pasado, luego de ser intervenido por particulares en el predio de una casa de calle Cerro San Antonio, en el barrio Cerro Pelado de Maldonado, donde estaba intentando cometer un hurto.
Trasladado a dependencias policiales, fue indagado incluso por su vinculación con otros hechos que se estaban investigando. Llevado ante la Justicia, terminó condenado a un año de prisión, como autor de un delito de hurto agravado, en grado de tentativa, y dos delitos de receptación.
A esa altura, tenía un antecedente de 2020 cuando en horas de la tarde del 10 de junio, junto a otro individuo fue intervenido por efectivos de la URPM de Zona 2, alertados por la presencia de personas extrañas en un predio de camino Benito Nardone, al Norte del centro de Maldonado.
La Policía ubicó detrás de un árbol una serie de efectos que este individuo y un compinche habían preparado para llevarse, y que habían hurtado de una finca de la zona. Fue condenado por un delito de hurto especialmente agravado, y penado con 6 meses de cárcel y otros 6 de libertad vigilada.
En el caso de Rivero Abreu, registra su último antecedente del 10 de abril de 2019, cuando lo enviaran tras las rejas por un delito de hurto especialmente agravado, en tanto antes había sido responsable, junto a otro delincuente, de dos arrebatos en la zona céntrica de Maldonado en 2017.
El sábado 14 de octubre de aquel año, en el entorno de la hora 18.45, una mujer fue víctima de dos arrebatadores en la céntrica intersección de calle Florida y avenida José Joaquín de Viana, en Maldonado. La Policía los capturó horas más tarde en avenida Roosevelt.
Con una serie de datos sobre el tipo de moto en la que se desplazaban y de los propios delincuentes, todas las unidades que se encontraban a esa hora de patrullaje comenzaron la búsqueda que dio resultado positivo horas después con la detención de los autores.
Uno era Miguel Ángel Rivero Abreu, quien junto a su compinche fue trasladado a Investigaciones de Zona 2, donde confesaron otro hurto. Ambos fueron a prisión por dos delitos de hurto especialmente agravados, por haberse cometido por sorpresa mediante despojo de lo que llevaba consigo la víctima, y la pluriparticipacion.