Dos sujetos rompieron un vidrio en un comercio de avenida Joaquín de Viana pero quedaron con las manos vacías. Registrados por las cámaras del local, la Policía pudo dar rápidamente con ellos.

En horas de la madrugada del viernes 28 de abril, fue cometido un hurto en un comercio de avenida Joaquín de Viana, en el centro de la ciudad de Maldonado. Según el denunciante, provocaron daños en una puerta ventana y hurtaron una caja registradora que no contenía dinero.

Analizados registros de las cámaras de seguridad del comercio, efectivos de Investigadores de la Zona Operacional 2, lograron identificar a dos hombres como responsables del hurto: Franco Alejandro Silva Bianchi, de 27 años, y Federico Figueredo Rodríguez, de 30.

Enterado el fiscal de 2° turno, dispuso la requisitoria de los sujetos siendo detenidos la tarde del mismo día del hurto. Realizada la audiencia en el Juzgado Penal de 11° turno, ambos fueron condenados como autores de 2 delitos de hurto especialmente agravados, y penados con 16 meses de prisión.

Los dos con uno

Mientras Franco Alejandro Silva Bianchi registraba un antecedente por hurto especialmente agravado del 25 de noviembre de 2020, por el que fue penado con medidas sustitutivas, Federico Figueredo Rodríguez cuenta con uno del lunes 3 de octubre del año pasado.

Ese día, lo condenaron como autor de un hurto especialmente agravado por la pluriparticipación, y también la pena fue de libertad a prueba, tras cometer un robo en un local de electrónica ubicado sobre calle Rincón de Maldonado, junto a otro individuo que sí fue a la cárcel.

El día anterior, ingresaron al comercio y se marcharon con una consola de videojuegos tras romper el vidrio de una ventana. La Policía se entrevistó con el propietario y obtuvo una serie de indicios y características de los responsables, lo que permitió ubicarlos más tarde en el centro fernandino.

Interrogados en dependencias de Investigaciones de Zona 2 y por disposición del fiscal de 3er. turno, Alfredo Federico Rodríguez y su compinche comparecieron en el juzgado penal de 4° turno, siendo condenados a distintas penas; para Rodríguez fueron 15 meses de libertad a prueba.

POR UN CELUIAR

En el entorno de las 19.00 horas del lunes 8 de mayo, el servicio de emergencias 911 recibió un llamado dando cuenta que en el exterior del refugio del Mides sito en bulevar Artigas, se encontraba un hombre que minutos antes le había sustraído el teléfono celular a un funcionario de establecimiento.

El robo había quedado registrado en la red de cámaras de video vigilancia del refugio, por lo cual personal del grupo PADO de Zona 2 concurrió al establecimiento procediendo a detener a D.N.A.F., de 27 años, quien fue derivado a dependencias policiales para más averiguaciones.

Enterada la fiscal de 2° turno, dispuso varias diligencias y la conducción de D.N.A.F. a su sede. El martes 9 de mayo, el sujeto compareció en el Juzgado Penal de 11° turno, donde resultó condenado como autor penalmente responsable de un delito de hurto especialmente agravado.

La pena impuesta fue de 12 meses de libertad a prueba, durante los cuales deberá presentarse una vez a la semana en la seccional policial más cercana a su domicilio, y realizar tareas comunitarias con una frecuencia de dos horas semanales durante el total de la penal.

POR ATÍCULOS DETOCADOR

El lunes 27 de marzo, personal de seguridad de un supermercado del centro de Maldonado, comunicó a través del teléfono de emergencias 911, que tenía retenida a una mujer que minutos antes había hurtado productos de tocador y belleza, e intentó retirarse sin abonar los mismos.

Al comercio concurrió personal de la URPM de Zona 2, que procedió a derivar a la mujer, identificada por las iniciales C.V.F.C., de 32 años, conjuntamente con la mercadería que había sustraído y los registros fílmicos del propio supermercado aportados por autoridades del mismo.

Enterada la Fiscalía de 4° turno, dispuso que la mujer fuera puesta en libertad, pero emplazada para el martes 9 de mayo a comparecer en la sede penal de 11° turno. Realizada la audiencia, se dispuso la condena de C.V.F.C como presunta autora de un delito de hurto en grado de tentativa.

Le impusieron una pena de dos meses de libertada prueba, durante los cuales debe presentarse una vez a la semana en la dependencia policial más cercana a su domicilio, al tiempo de tener que realizar tareas comunitarias con una frecuencia de dos horas semanales.