Fueron imputados por una serie de delitos ya que además del presunto secuestro de una mujer cometido el martes 20 de junio, cinco días antes habían privado de su libertad y agredido brutalmente a un hombre que trabajaba con el sujeto acusado de haber cometido estafas con la construcción de cabañas de madera.
Los tres detenidos, fueron formalizados por la autoría de varios delitos, y como medida cautelar, enviados a cumplir prisión preventiva por 150 días, aunque uno de ellos será evaluado por un médico forense que, determinará si está en condiciones de salud para cumplir la preventiva en prisión.
Conducidos la tarde de este jueves 22 de junio a la sede Penal de 4° turno, M.S.C.R. (32) y S.d.L.R. (26), fueron formalizados como presuntos autores de: un delito de secuestro, un delito de privación de libertad especialmente agravado (por las amenazas y sevicias), y un delito de lesiones personales.
También como presuntos autores de: un delito de rapiña especialmente agravada (por la pluriparticipación), un delito de porte de arma de fuego por reincidente, y un delito de tráfico interno de armas, un delito de hurto especialmente agravado (por la pluriparticipación), y dos delitos de justicia por mano propia.
El tercer formalizado, D.A.D.C. (35), también está acusado por los mismo delitos pero como presunto coautor. La impactante carga de imputaciones para los tres hombres, se debe a que el Fiscal de la causa Ignacio Montedeocar, los vinculó con otro hecho muy violento que protagonizaron el jueves 15 de junio.
Ese día en horas de la tarde, M.S.C.R., S.d.L.R. y D.A.D.C. habrían privado de su libertad, robado y golpeado con inusitada violencia, al extremo de provocarle algunas lesiones, a un hombre que cumple tareas por el programa Accesos del Mides, en el hospital Elbio Rivero de Maldonado.
Sobre la hora 17.00, los imputados llegaron en camioneta desde Montevideo, junto a un cuarto hombre por ahora identificado solo por el alias “Barber”. Tras no encontrar a la víctima en un refugio del Mides, se dirigieron al nosocomio y por la fuerza sacaron del vestuario a W.P.
Bajo amenazas y golpes querían saber donde ubicar a P.D.B.A., el constructor de cabañas acusado de haber estafado en unos US$ 3.000 a M.S.C.R., quien lo había contratado para un trabajo en un predio propiedad de sus padres en balneario La Esmeralda, en el departamento de Rocha.
Según la acusación Fiscal, a W.P. llegaron incluso a golpearlo con un bate de béisbol y grabaron con un teléfono las agresiones y presiones a las que lo sometieron. Al trabajador lo abandonaron en Ruta Interbalnearia, unos kilómetros al Oeste de La Capuera, tras despojarlo incluso de su calzado.
La víctima de este caso, es usuario de un refugio del Mides en Maldonado, y en algún momento habría trabajado con P.D.B.A., el sujeto señalado por varias estafas en perjuicio de familias que le entregaron fuertes sumas de dinero en dólares para construcciones en madera que nunca concretó.
Respecto a lo ocurrido el martes 20, ya que la información aportada por la Policía había sido muy escueta y confusa, se confirmó que al encuentro con los ahora imputados, en una zona rural de Camino a Lapataia, fue E.A., quien trabaja con P.D.B.A., y la pareja de este, J.B., en un auto alquilado.
Allí este hombre y la mujer fueron presionados y amenazados para saber del constructor acusado por las maniobras. La pareja de este incluso, llegó a enviarle varios mensajes informándole de la situación y que estaban exigiendo la devolución de unos US$ 3.000 en un plazo de media hora.
Finalmente todos salieron en dirección a un hostel de balneario Buenos Aires donde había pernoctado P.D.B.A., pero no se encontraba allí. En ese lugar fue dejado E.A. en el coche Chevrolet Spark, pero los tres hombres se retiraron en la camioneta llevando a J.B., la pareja del constructor.
Fue en ese momento que se radicó la denuncia ante la Policía y se desató el amplio operativo que culminó con la detención del trío en Ruta Interbalnearia a la altura de Parque del Plata, llevando a la mujer. Se habían descartado de una pistola Beretta calibre 7.65, pero aún tenían el bate con el que habían golpeado a W.P. días antes.
En este caso participó una cuarta persona que no estuvo en el posterior secuestro de la mujer en Camino a Lapataia. Pero, en los dos casos, el objetivo era lograr recuperar unos US$ 3.000 que uno de los imputados le había entregado a P.D.B.A. para ampliar una cabaña de sus padres.
Por el momento no se sabe si en forma paralela habrá algún tipo de acción judicial contra P.D.B.A., un hombre que cuenta con una serie de antecedentes penales, que el año pasado había sido denunciado por varias víctimas de sus maniobras en el periodístico de canal 4 Santo y Seña.