El sujeto, tras ser indagado como el principal sospechoso, había quedado en libertad por falta de elementos probatorios, pero un contundente trabajo de Policía Científica de Maldonado y la Dirección Nacional de la misma repartición, aportó pruebas esclarecedoras que lo llevaron a la cárcel.

Sergio Alfredo Sosa Palacio, de 30 años y apodado “El Garrapata”, fue condenado este martes 9 de enero como autor de un delito de rapiña especialmente agravada en reiteración real, con un delito de lesiones personales y un delito de amenazas agravadas, siendo penado con 6 años de penitenciaría.

Se trata del autor de la violenta rapiña en perjuicio de una señora de 70 años, que fue sorprendida en su humilde casa ubicada en avenida Elías de Vicenzi y calle España, en Pan de Azúcar, alrededor de la hora 4.30 del domingo 7 de enero, siendo salvajemente golpeada.

Si bien el sujeto -que de haber cumplido una pena impuesta el 31 de octubre de 2018, haría menos de tres meses que quedó en libertad-, fue desde el primer momento el principal sospechoso y en ese carácter indagado, la falta de pruebas contundentes le permitieron por un día más seguir en libertad.

En conferencia de prensa ofrecida este martes a última hora por parte del jefe de Policía de Maldonado, Erode Ruíz, se conoció que fue clave el trabajo de Policía Científica, que remitió rápidamente una serie de indicios recogidos en la escena del hecho, a la Dirección Nacional.

Aunque toda la ciudad de Pan de Azúcar señalaba a “El garrapata” como responsable del hecho, no se habían logrado en primera instancia elementos probatorios bien claros hasta que los resultados de los análisis realizados, ubicaron a este delincuente en la escena.

Tras ello, fue nuevamente detenido y trasladado a Maldonado donde compareció ante la Justicia con el resultado indicado. El Jefe de Policía, también aclaró que el delito de copamiento no se configuró en ningún momento, como lo señalaron algunos medios, ya que la señora no fue privada de su libertad.

Por la ventana

Sergio Alfredo Sosa Palacio, ingresó a la casa de su víctima por una ventana y la sorprendió durmiendo, pero como ella se despertó y empezó a gritar, se le arrojó encima y le tapó la boca. La señora ofreció una tenaz resistencia y comenzó a patear las paredes para alertar a su vecino.

Fue entonces que el delincuente no dudó en pararse sobre las piernas de ella con gran fuerza mientras le continuaba tapando la boca hasta hacerla perder el conocimiento. El vecino, que había alcanzado a escuchar el pedido de ayuda, puso en fuga al delincuente y le salvó la vida a la mujer.

Alcanzó incluso a perseguir a “El Garrapata” que se domicilia muy cerca de la casa de la víctima. La señora, de 70 años, fue trasladada a sanatorio Cantegril donde le practicaron una serie de estudios por los golpes recibidos, pero afortunadamente ya está de alta y recuperándose junto a su familia.

El mismo domingo en horas de la tarde, este individuo abordó al hijo de la víctima y al vecino blandiendo un arma blanca tipo corte carcelario, amenazando a ambos cuando se encontraban en la casa de la señora. En el allanamiento a su casa se encontraron dos hierros con punta y forma de daga de un metro, entre otras cosas.

No es la primera

Sergio Alfredo Sosa Palacio, había sido remitido a la cárcel el miércoles 31 de octubre del año 2018. El entonces Juez Penal de 4° turno, le imputó a él y a otro sujeto, la autoría de un delito de hurto agravado y dos delitos de rapiña agravados en régimen de reiteración real, y lo penó con 5 años de penitenciaría.

El martes 30 de octubre de aquel año, hubo una seguidilla de hechos delictivos en la ciudad de Pan de Azúcar, que puso inmediatamente en alerta a la Policía de la ciudad y a investigadores del entonces Distrito 1: se habían cometido dos rapiñas y un hurto, probablemente por parte de los mismos delincuentes.

Aquella jornada en horas de la madrugada, una mujer que se encontraba esperando un ómnibus, fue abordada por dos sujetos en calle Francisco Bonilla. Bajo amenazas con armas de fuego, le exigieron la entrega del dinero que tuviera consigo, y se fueron con solamente $ 200.

Cuando la Policía comenzó a trabajar en este caso, se supo que en calle Álvaro Figueredo de la misma ciudad, también mediante amenazas con un arma de fuego, habían atracado a otra persona. Dos individuos lograron hacerse de $ 900 en efectivo y un teléfono celular.

Al mismo tiempo, se supo que en una finca de Elías Devicenzi y Colón, mediante forzamiento de una ventana, habían sustraído $ 57.000, una garrafa de supergas de 13 kilos, un parlante, una caja con bijouterie, un televisor, una tableta, una alcancía, una pistola de aire comprimido y joyas varias.

Un rápido trabajo de los investigadores de la actual Zona 1, estableció quienes serían los autores no solo de la última rapiña, sino de la anterior y también del cuantioso robo a la finca. Horas más tarde fue detenido uno de los delincuentes con el teléfono celular de una víctima y la caja con bijouterie.

Mientras el sujeto -confeso autor de los tres hechos-, fue indagado, el miércoles 31 a la mañana la Policía logró detener a su compinche. Ambos tras las indagatorias de rigor fueron llevados ante la Justicia Penal donde resultaron condenados por dos rapiñas agravadas y un hurto agravado.

Antes, el 3 de septiembre de 2016, había sido procesado con prisión (regía el anterior CPP) como encubridor de una rapiña que había sido cometida por otro sujeto en una panadería de la pequeña localidad de Kilómetro 110, ubicada al Norte de la ciudad de Pan de Azúcar.

Si bien Sosa Palacio no participó directamente en el atraco, estuvo en pleno conocimiento de lo hecho por su amigo el viernes 2 de septiembre de aquel año, sobre la hora 18.00, cuando ingresó al comercio esgrimiendo un revólver calibre 32 con el que amenazó al dueño y a clientes.