El procedimiento de la Brigada Departamental Antidrogas de la Policía de Maldonado, fue realizado en una finca del barrio La Boca, donde ya había funcionado un centro de venta de estupefacientes.

A mediados del mes de febrero, la Brigada Departamental Antidrogas (BDA de la Policía de Maldonado, obtuvo datos respecto a que en una casa ubicada en las calles Pedro Agorrody y Pedro Loustane, en el barrio La Boca de San Carlos, se estarían comercializando sustancias estupefacientes.

En esa finca ya había funcionado un negocio similar y a su frente estaría un delincuente poseedor de varios antecedentes, los últimos por delitos relacionados con las drogas. Iniciada la investigación en la órbita de la Fiscalía de 2° turno de Maldonado, se obtuvieron distintos elementos probatorios.

Tras varios días de trabajo policial, se constató un importante movimiento de personas que ingresaban constantemente y a toda hora en esa casa, por lo que se solicitó a la Fiscal actuante, que tramitara la orden de allanamiento, la que fue otorgada por el Juez Penal de 4° turno.

El miércoles 28 de febrero, se concretó el allanamiento de la finca y se logró la detención de Pablo Enrique González Nogueira, de 44 años, y de Julio Raúl Suárez, de 48, ambos poseedores de antecedentes por causas relacionadas al tráfico de estupefacientes.

En el allanamiento, además de la detención del dúo de delincuentes, se incautó un morral con 19 lágrimas de clorhidrato de cocaína, un teléfono celular y $ 1.620. Enterada la Fiscal actuante en el caso, dispuso que los dos detenidos fueran conducidos a su sede para ser indagados.

Cumplida la audiencia en el Juzgado Penal de 4° turno, donde se dispuso la condena de Julio Raúl Suárez como autor de un delito de suministro de sustancias estupefacientes, siendo penado con 2 años y 1 mes de prisión. Pablo Enrique González fue condenado como cómplice del mismo delito y penado con 9 meses de cárcel.

Cargando pesadas mochilas

Julio Raúl Suárez, registra su último antecedente por un delito similar del viernes 3 de febrero del año pasado, luego de caer en el marco de un importante operativo policial que incluyó allanamientos en 4 viviendas ubicadas en un mismo padrón, en calle Pedro Agorrody y rambla Costanera, en el barrio La Boca de San Carlos.

En el entonces Juzgado Penal de 2° turno de San Carlos, fue imputado por un delito continuado de negociación de sustancias estupefacientes, en reiteración real, con un delito de tenencia no autorizada de arma de fuego y/o municiones, por lo que estuvo muy poco tiempo en la cárcel.

En una de las viviendas, los efectivos a cargo de la operación “Skate” encontraron a un hombre en momentos que incineraba algunos elementos y drogas. Recolectada parte de la misma y realizada la prueba química, dio positivo para clorhidrato de cocaína. Pero en el mismo operativo, fueron detenidas otras 4 personas.

Entre los detenidos, estaba Julio Raúl Suárez. Además, se incautó: 230 “chasquis” de clorhidrato de cocaína, $ 46.877, una balanza de precisión, una pistola, un rifle, proyectiles varios, teléfonos celulares, e implementos utilizados para el fraccionamiento y venta de drogas.

Julio Raúl Suárez, ya contaba en ese momento con varios antecedentes penales y había sido condenado anteriormente el 2 de noviembre del año 2020, imputado por un delito similar al de febrero del año pasado. Fue atrapado en un procedimiento de la Brigada Departamental Antidrogas (BDA).

Era investigado a raíz de una denuncia que indicaba que en su casa de San Carlos se vendían drogas. Obtenidos elementos probatorios fue allanada la propiedad con apoyo de la Guardia Republicana e investigadores de Zona 3, siendo luego condenado por tenencia no para consumo de estupefacientes.

Este individuo, anteriormente había ido tras las rejas el 10 de agosto del año 2015, cuando robó del interior de un contenedor destinado a vivienda, a la altura del kilómetro 16 de la Ruta 39, hecho que fue observado por el propio dueño de la instalación que radicó la denuncia.

Julio Raúl Suárez se llevó solo $ 350 que era todo el dinero que había. La víctima aportó datos sobre el delincuente que había huido en dirección a San Carlos y terminó detenido en la ciudad. Fue procesado con prisión por una tentativa de hurto especialmente agravado por la penetración domiciliaria.

Además de robar la pequeña suma de dinero mencionada había revuelto todo en el interior del contenedor que era utilizado como vivienda por la víctima. Por otra parte, poco después de ser detenido, se supo que estaba requerido por un juzgado de la ciudad de Rocha.

Pablo Enrique González Nogueira, también registra varios antecedentes, el último de los cuales es del martes 18 de octubre de 2022 cuando en el Juzgado Penal de 11° turno de Maldonado lo condenaran como autor de tres delitos de hurto, uno en grado de tentativa, por lo que terminó en prisión.

El domingo 16 de octubre de aquel año, fue solicitada la presencia policial en un supermercado ubicado en avenida Aiguá, en Maldonado, donde un individuo, según expresó la denunciante, había robado distinta mercadería en dos oportunidades el mismo día, y en ese momento nuevamente allí.

Un equipo de Grupo PADO de Zona 2 acudió al lugar, interviniendo a González Nogueira, quien llevaba entre sus ropas un pack de implementos de higiene personal. La denunciante aportó las filmaciones obtenidas donde estaban registrados los ilícitos cometidos por el mismo hombre.

Anteriormente, el martes 3 de marzo de 2020, la entonces Jueza Penal de 1° turno de San Carlos, formalizó y luego condenó a Pablo Enrique González Nogueira, como autor penalmente responsable de un delito de hurto especialmente agravado, y lo envió 16 meses tras las rejas.

El día anterior, fue detenido vendiendo efectos robados en una finca de calle Leonardo Olivera, en San Carlos, a la que había ingresado mediante daños en una ventana. Los primeros policías que acudieron al lugar fueron informados que el ladrón estaba cerca de allí vendiendo el producido del robo.

Pero a su vez, el 21 de octubre del año 2015, este sujeto había sido procesado con prisión en un Juzgado Penal de San Carlos, imputado por la comisión de un delito de rapiña especialmente agravada por el uso de arma, en grado de tentativa, tras intentar atracar una panadería.

Pablo Enrique González Nogueira, ingresó al comercio ubicado a la altura de calles José Pedro Agorrody y Juan de Dios Curbelo, sorprendiendo a una empleada, de 39 años, empuñando un arma blanca y solicitándole bajo amenazas la entrega del dinero que hubiese en caja.

La mujer, en medio de la sorpresa y un gran temor, atinó a disparar hacia otra dependencia de la panadería -que funciona las 24 horas-, actitud con la que puso en fuga al delincuente que se alejó rápidamente del lugar sin lograr su objetivo de hacerse de dinero.

El trabajo de la entonces Brigada de Hurtos de la comisaría de San Carlos, durante la investigación pudo obtener elementos que condujeron a los investigadores hacia el autor. Cinco días después, González Nogueira fue detenido junto a un adolescente que luego fue desvinculado del caso.