Se trata de un nuevo capítulo de la operación “Santa” liderada por la Brigada Departamental Antidrogas (BDA) de la Policía de Maldonado, que ha demandado continuas tareas de investigación, vigilancia e inteligencia que se iniciaron en de noviembre del año pasado, cuando durante un allanamiento en una chacra cercana a San Carlos fue detenida una mujer. Con la nueva condena, ya son 4 las personas integrantes de la organización que cayeron en manos de la Policía.
A pesar de los procedimientos anteriores en el marco de la operación “Santa”, que terminaron con importantes incautaciones de drogas y el sometimiento a la Justicia de varias personas, la BDA quedó con varias puntas para continuar investigando a una organización dedicada al ingreso de drogas desde Brasil.
El viernes 22 de noviembre último, nuevos trabajos de inteligencia dieron resultado cuando se pudo confirmar que una camioneta Renault Duster, saldría de la norteña ciudad de Artigas con destino al departamento de Maldonado, transportando una importante cantidad de droga para ser “guardada” en la zona.
En forma inmediata, efectivos de la Brigada Departamental Antidrogas partieron desde Maldonado para establecer un puesto de control en una ruta del departamento de Florida por la que pasaría la camioneta que se desplazaba desde el Norte, la que ya estaba siendo convenientemente seguida y vigilada.
Instalado el retén, con apoyo de efectivos del Grupo de Reserva Táctica (GRT) de Florida, el conductor de la camioneta al percatarse de la presencia policial, detuvo la marcha en una zona rural y se dio a la fuga dejando abandonado el vehículo, aunque minutos después pudo ser detenido e identificado como C.M.S.E.
Revisada la camioneta, en su interior había 21 ladrillos de pasta base de cocaína, con un peso de 21,500 kilogramos. Confirmada la detención e incautación de la droga que tenía como destino este departamento, se concretaron dos allanamientos en Maldonado: uno en el barrio Lausana y otro en la zona del Paseo de la Aguada.
En ambos casos se incautaron algunos efectos que la Policía informó fueron incorporados a la carpeta de investigación, aunque no reveló de que se trataba. En los allanamientos, no se encontró droga de ningún tipo y no hubo más personas detenidas, por lo cual el joven conductor de la camioneta fue el único sometido a la Justicia.
Cumplida la declaración ante la Fiscal del caso, C.M.S.E. compareció en el Juzgado Penal de 11° turno, donde lo condenaron como autor de un delito de transporte de sustancias estupefacientes prohibidas, siendo penado con 3 años de penitenciaría. La droga incautada fue enviada al ITF, en tanto la Renault Duster y teléfonos celulares quedaron incautados.
Varios capítulos
La interminable operación “Santa” liderada por la Brigada Departamental Antidrogas (BDA) de la Policía de Maldonado, ha demandado tareas de investigación, vigilancia e inteligencia que se iniciaron en el mes de noviembre del año pasado, cuando durante un allanamiento en una chacra cercana a San Carlos fue detenida una mujer.
Aunque aquella vez no se encontró un solo gramo de droga, se incautó un arma de fuego por lo que la mujer fue sometida a la Justicia por su vinculación con actividades ilícitas. Desde allí se siguió trabajando en conexiones con un individuo de la San Carlos que comenzó a ser vigilado, sospechado de participar en actividades de narcotráfico.
Con el paso del tiempo se pudo confirmar que Luis Ramón Acuña Silva, de 42 años, sería responsable de un importante centro de acopio y distribución de grandes cantidades de drogas procedentes de Brasil -transportadas vía terrestre-, ya no solo para abastecer el mercado local sino para cubrir otras zonas del país.
El martes 30 de julio de este año, Acuña Silva fue observado por un equipo de la BDA cuando ingresó y posteriormente salió en forma sospechosa de unas cocheras ubicadas en calle Ituzaingó de San Carlos, tripulando una camioneta Fiat Fiorino, para encontrarse con los ocupantes de un Chevrolet Prisma en avenida Alvariza.
Luis Ramón Acuña Silva subió a la parte trasera del coche -en lo que claramente era una entrega de droga-, descendiendo y retirándose del lugar en la Fiorino minutos después. Fue en ese momento que se solicitó apoyo para seguir el Chevrolet Prisma que salió de la ciudad y tomó Ruta 9 en dirección a Montevideo.
Sin embargo, sus ocupantes se percataron que eran seguidos y en determinado momento se descartaron por una ventanilla de un paquete que contenía pasta base. Desatada la persecución, el coche fue interceptado en calle Ceibal, en el barrio Sur de la ciudad de Pan de Azúcar, siendo detenidos sus tres ocupantes.
Eran Gonzalo Ramón Sánchez Andrade, de 29 años; Eleandro Aroon Cuello Jacques, de 34 y una joven de 21 años. Mientras los tres fueron trasladados a Maldonado para ser indagados en la órbita de la Fiscalía de 5° turno a cargo de Jorge Vaz, al día siguiente los efectivos de la BDA detuvieron en su casa de calle Carlos Cal, a Acuña Silva.
Durante el allanamiento, se incautó la camioneta Fiat Fiorino, un automóvil Peugeot, US$ 21.446 y $ 350.230, además de la llave de la cochera y otros efectos. Posteriormente se concurrió a la cochera donde había acopiados 46 ladrillos de cocaína pura (47,945 kilos), 3 ladrillos de pasta base (3,644 kilos) y 420 gramos de marihuana.
En el mismo lugar se encontró: un revólver Taurus 357 con seis proyectiles y otro Smith & Wesson con ocho balas, así como dos pistolas 9m.m. con cuatro cargadores vacíos y quince proyectiles. Además, en un taller mecánico de San Carlos se incautó una camioneta Ssangyong, también propiedad de Acuña Silva.
Los tres hombres fueron llevados ante la justicia donde terminaron condenados por la autoría de distintos delitos, en tanto la joven de 21 años que acompañaba a los dos individuos que habían llegado a comprar en San Carlos 1,038 kilos de pasta base -de la que se descartaron llegando a Pan de Azúcar-, quedó en libertad.
Eleandro Aroon Cuello Jacques y Gonzalo Ramón Sánchez Andrade, fueron condenados como autores penalmente responsables de un delito de transporte de sustancias estupefacientes prohibidas, siendo penados con 2 años, y 2 años y 2 meses de penitenciaría, respectivamente.
Luis Ramón Acuña Silva en tanto, fue condenado como autor de un delito de almacenamiento y distribución de sustancias estupefacientes prohibidas, en régimen de reiteración real, con un delito de tenencia no autorizada de armas y municiones, y un delito de receptación agravado, siendo penado con 4 años de penitenciaría.
Por otra parte, se dispuso decomisar en favor de la Junta Nacional de Drogas, las camionetas Fiat Fiorino y Ssanyong, así como los US$ 21.446 y los $ 350.230, todo propiedad de Acuña Silva. Las armas fueron enviadas al Servicio de Material y Armamento (SMA) del Ejército para su destrucción.