El imputado es un conocido delincuente de la zona de Piriápolis que ahora suma 7 antecedentes penales. Esta vez hurtó un birrodado pero a las pocas horas lo detuvieron mientras se desplazaba por calles del balneario.
El jueves 6 de marzo, un hombre concurrió a la seccional 11ª de Piriápolis a denunciar el robo de su bicicleta (marca Scott). Dijo que se la habían llevado en horas de la tarde de esa misma jornada del patio de su casa de calle Las Piedras, en Piriápolis, aportando todas las características de la unidad.
Cerca de la hora 21.00 del mismo jueves 6, policías que se encontraban desplegados en la ciudad, encontraron a un conocido delincuente en calle Pablo Zufriategui con la bicicleta hurtada, por lo que procedieron a detenerlo. Se trataba de Ángel Emanuel Tuduri Benítez de 28 años y poseedor de múltiples antecedentes.
Las actuaciones continuaron en la seccional policial 11ª donde surgió que estaba vinculado al intento de robo de una yegua de la estancia Quebrada del Castillo, ubicada al Noreste de Piriápolis sobre Ruta 37. Llevado al día siguiente a la Fiscalía de Maldonado, finalmente compareció en el Juzgado Penal de 11° turno.
Ángel Emanuel Tuduri Benítez, fue condenado como autor penalmente responsable de dos delitos de hurto agravados, uno en grado de tentativa y ambos en régimen de reiteración real entre sí, siendo penado con 16 meses de prisión, lo que fue tomado con beneplácito por todos quienes conocen en Piriápolis de sus andanzas.
Tenía otros seis
El último antecedente de Tudurí Benítez es del miércoles 22 de marzo de 2023, cuando durante su comparecencia en el Juzgado Penal de 4° turno, lo condenaran como autor de 4 delitos de hurto especialmente agravados, en reiteración real, con 2 delitos de violación de domicilio, uno agravado, con 2 delitos de hurto. Lo penaron con 23 meses de prisión.
El martes 14 de marzo de aquel año, fue cometido un hurto en una vivienda de calle Gabriel Pereira, en Piriápolis, de la que se llevaron una cartera con documentos y $ 4.000, y habían dejado preparados en el exterior, varios efectos para ser llevados. Habían ingresado mediante la rotura de una ventana de madera.
La investigación iniciada, incluyendo la obtención de registros de cámaras de video vigilancia, permitieron a la Policía confirmar que el autor había sido Ángel Emanuel Tuduri Benítez, quien se encontraba formalizado desde el lunes 27 de febrero de 2023 y cumpliendo distintas medidas sustitutivas.
El domingo 12 de febrero de aquel año, efectivos de la Zona Operacional 1 trabajaron para esclarecer un hurto cometido en una casa ubicada sobre calle Julián Laguna, en Piriápolis. El dueño de la propiedad había sido alertado por un vecino que había observado una abertura forzada y varios efectos acopiados en el exterior.
Al llegar, constató que le habían hurtado distintas prendas de vestir, implementos de aseo personal, una batería de cocina y cuchillos, entre otros efectos. En la finca trabajó Policía Científica recogiendo pruebas y muestras que fueron enviadas al laboratorio de Dirección Nacional de Policía Científica.
Los resultados indicaron que el autor había sido Ángel Emanuel Tuduri Benítez, conocido delincuente residente en la zona que ya contaba con 5 antecedentes por hurtos y violación de domicilio, quien además estaba involucrado en otro robo ocurrido el 18 de diciembre de 2022 en una finca de Ruta 37.
En aquella ocasión había hurtado un rifle calibre 22, que luego la Policía descubrió que estaba ofreciendo a la venta. Puesto a disposición de la Fiscalía de 2° turno, Tuduri Benítez fue conducido al Juzgado Penal de 4° turno donde se formalizó la investigación y le impusieron varias medidas.
El lunes 27 de febrero de aquel 2023, le imputaron la autoría de dos hurtos especialmente agravados, disponiéndose como medida cautelar su arresto domiciliario nocturno de 22.00 a 6.00 horas, y la prohibición de comunicación y acercamiento a menos de 500 metros de la víctima del último robo y del testigo, por 90 días.
Al mes siguiente se ratificó que fue responsable de los dos hurtos mencionados, pero que además había cometido otros, antes y después. El miércoles 25 de enero, robó una moto marca Yumbo 125c.c. del patio de una casa de calle 14 de Febrero, al Norte de Piriápolis, en la zona de Pueblo Obrero.
El martes 7 de febrero (siempre de 2023), se había llevado otra moto marca Baccio 110c.c. que se encontraba estacionada frente a una casa en la zona de La Cascada, la que posteriormente apareció abandonada en un monte de Pueblo Obrero y retornada tras los peritajes a su legítimo dueño.
Finalmente, se probó que ya formalizado y con las medidas sustitutivas descriptas, el sábado 4 de marzo, Tuduri Benítez cometió otro hurto en una finca de calle Simón del Pino, también en Piriápolis, de la que mediante daños en la puerta principal se llevó entre otros efectos, un revólver calibre 44.
Los investigadores obtuvieron información del lugar donde se estaba quedando, siendo detenido y derivado a la dependencia policial a disposición de la Fiscalía de 4° turno, desde donde se dispuso su comparecencia en el Juzgado Penal de 11° turno, para finalmente ser enviado a la cárcel.
El anterior antecedente de este empedernido ladrón, era del sábado 17 de abril de 2021 cuando le imputaran la autoría de dos delitos de hurto especialmente agravados, cometidos junto a otro delincuente cinco días antes, en horas de la noche, en dos comercios de rambla de los Ingleses, en Piriápolis.
Una de las denunciantes de aquellos robos, propietaria de un puesto de feria, detalló el faltante de $ 25.000 y daños en la puerta de acceso a su local; otra víctima, dueña de un local de venta de pescado, constató el forzamiento de la puerta de ingreso y el hurto de cinco cuchillos de trabajo.
Tras la investigación a cargo de efectivos de la Zona Operacional 1 sobre las filmaciones obtenidas de cámaras de video vigilancia instaladas en ambos locales, fue posible la individualización de los dos perpetradores, uno de los cuales era el muy conocido Ángel Emanuel Tuduri Benítez.
Ambos individuos fueron detenidos el domingo 18 de abril de 2021 en la vía pública, y posteriormente sometidos a la Justicia. La titular de la sede Penal de 11º turno, los condenó como autores de dos delitos de hurto especialmente agravados, en reiteración real y los envió a la cárcel.
Pero anteriormente había sido remitido a prisión el lunes 8 de enero del año 2020, cuando la Justicia lo penara con 15 meses de prisión, imputado como autor de un delito de hurto agravado, con un delito de violación de domicilio, con otro delito de hurto en grado de tentativa.
Los dos robos -uno de los cuales no se pudo consumar-, ocurrieron la mañana del martes 7 de enero de aquel año en fincas cercanas entre sí, ubicadas en el barrio Country de Piriápolis y en Pueblo Obrero. Ángel Emanuel Tuduri Benítez no actuó solo sino con otros dos delincuentes.
Años antes, el lunes 25 de junio de 2018, cuando hacía solo un mes que había recuperado la libertad, en proceso abreviado fue condenado a 10 meses de prisión como autor de un delito de violación de domicilio agravado, con un delito de hurto, con otro delito de violación de domicilio, todos cometidos en la misma zona.
El lunes 4 de junio de aquel lejano año, denunciaron ante la seccional policial 11ª de Piriápolis, el robo de dos respaldos de cama de bronce, que se encontraban en el patio posterior de una finca ubicada en calles Celedonio Rojas y Dámaso Antonio Larrañaga, en la zona de Pueblo Obrero.
De acuerdo a los datos aportados a los investigadores, no sería ajeno al hurto Ángel Emanuel Tuduri Benítez, quien ya había sido enviado a la cárcel el domingo 21 de enero del mismo año 2018, como autor de un delito de hurto en grado de tentativa, habiendo recuperado la libertad en el mes de mayo.
La investigación determinó que había vendido varios caños de bronce a otro sujeto. Mientras era buscado, en horas de la madrugada de aquel lunes de junio de 2018, se denunciaron daños en la puerta de una camioneta -estacionada en calle Zolezzi- y un gran desorden en el interior.
Datos obtenidos por la Policía confirmaron que el autor pudo haber sido Tuduri Benítez. Pero no fue todo, porque horas más tarde un vecino que cuenta con cámaras de seguridad en su domicilio y comercio, vio a un desconocido que había ingresado a su propiedad y estaba forzando una puerta.
El frustrado ladrón no pudo ingresar al comercio y optó por retirarse. Del análisis de las filmaciones, surgió que se trataba de Tuduri Benítez, cuya búsqueda se intensificó hasta que pudo ser atrapado y conducido a dependencias policiales para responder por los tres hechos mencionados.