En las últimas horas de este viernes, la Justicia de Maldonado procesó a dos mujeres y a un hombre por el delito de omisión de asistencia, en el marco de la investigación por la aún confusa muerte de Danny Daniel Benítez (33), ocurrida la madrugada del domingo 18 de septiembre.
Este viernes, la Jueza Penal de 4° Turno de Maldonado, procesó sin prisión a las mujeres identificadas como L.M.R.L. y R.V.S.P., así como al hombre que responde a las iniciales B.N.R.B., por la comisión de un delito de omisión de asistencia. Como medida sustitutiva, les impuso arresto domiciliario total por 90 días.
Estas tres personas, están vinculadas con la confusa muerte de Danny Daniel Benítez, de 33 años de edad, ocurrida la madrugada del domingo 18 de septiembre en una finca del barrio San Antonio, donde podría haber participado en una “ruleta rusa” aunque la Policía sospecha de un homicidio.
Entre los procesados, se encuentra la mujer que mantenía una relación sentimental con la víctima, y un hombre que fue detenido la jornada del pasado miércoles en el barrio Jardín los Treinta y Tres, quien durante la investigación inicial había sido relacionado con los hechos pero no había sido ubicado.
Todo raro
Como lo informara MaldonadoNoticias, el miércoles 21 de septiembre, la Jueza Penal de 4° Turno envió a la cárcel a R.F.N.P., de 45 años de edad, por la comisión de un delito de encubrimiento, aunque la Policía nunca reveló si encubrió un homicidio o lo que podría ser un accidente.
Danny Daniel Benítez fue encontrado agonizando a los fondos del hospital Elbio Rivero de Maldonado, a donde había sido llevado en un vehículo, aparentemente por dos hombres y la mujer con la que la víctima mantenía una relación sentimental, según se pudo establecer.
Esta mujer -ahora procesada- fue la que avisó a un efectivo policial que cumplía tareas de vigilancia en el nosocomio, de que en la esquina de las calles Barton y Ramos se encontraba el cuerpo de un hombre moribundo. Benítez tenía un disparo en la sien que le atravesó el cráneo.
La mujer fue detenida y durante los interrogatorios reveló algunos datos de lo que realmente ocurrió en la finca de la calle Gregorio Sanabria, en el barrio San Antonio. Allí durante un allanamiento posterior, se encontraron salpicaduras de sangre en paredes y en parte del mobiliario.
En la misma casa -cuyo dueño posteriormente fue detenido y resultó ser el primer procesado por este caso-, también se incautaron equipos de comunicaciones, munición viva y un proyectil deformado. Finalmente fue detenido otro hombre que fue el responsable del traslado del cuerpo.
Tras los interrogatorios y la reconstrucción de lo ocurrido en presencia de la Jueza del caso (instancia llevada a cabo la tarde del martes 20), tanto la pareja del fallecido como el hombre que traslado a Benítez al borde de la muerte hasta el hospital, habían recuperado la libertad.
Sin aclarar
La noche del sábado 17, Benítez se encontraba junto a varias personas (al menos cuatro); una hipótesis es que, en esas circunstancias estaban manipulando un arma de fuego en lo que sería una “ruleta rusa”, momento en el cual este hombre poseedor de varios antecedentes se hirió de muerte.
El hecho ocurrió en las primeras horas del domingo en la casa de R.F.N.P., donde además funcionaría una boca de venta de drogas. Cuando Danny Daniel Benítez recibió el disparo, quienes estaban con él no se atrevieron a llevarlo directamente al hospital de Maldonado.
Como forma de evitar involucrarse (aunque no pensaron que la Policía investigaría lo ocurrido a partir de los últimos pasos conocidos de la víctima y sus allegados), decidieron cargarlo en un vehículo y dejar el cuerpo literalmente abandonado y agonizando en los fondos del nosocomio.
Las declaraciones de R.F.N.P., así como las de la pareja del occiso y el hombre que reconoció haberlo trasladado, son contradictorias. La Policía caratula el hecho como homicidio, aunque el mortal disparo puede haber sido accidental mientras se manipulaba el arma de fuego que aún no fue hallada.
Según investigadores, la zona de ingreso del proyectil hace difícil pensar que el propio Benítez se haya disparado accidentalmente: queda claro que alguien le disparó a muy corta distancia; de lo contrario, él realmente se apuntó a la sien en el “mortal juego” conocido como ruleta rusa.