La Dinot (Dirección Nacional de Ordenamiento Territorial), dependiente del Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente (Mvotma), presentó los avances del trabajo sobre la conceptualización, mapeo y análisis de las áreas urbanizadas de todo el país.

 

El trabajo se realiza en línea con las directivas establecidas por ONU Hábitat para el cumplimiento de los objetivos de desarrollo sostenible, y la presentación estuvo a cargo de la gerenta del Área de Planificación y Ordenamiento Ambiental del Territorio, Ana Álvarez y su equipo.

La instancia marcó el comienzo de la transición hacia el nuevo gobierno, ya que estuvieron presentes el actual director nacional de Ordenamiento Territorial José Freitas y el futuro, y su par del gobierno nacional que asume el 1° de marzo, Norbertino Suárez.

El objetivo es identificar y consensuar criterios que permitan establecer con claridad el límite urbanizado de las ciudades. Encontrar los factores que permitan armonizar los indicadores de cobertura y ocupación del suelo con los acordados a nivel internacional, es clave para tomar decisiones de política urbana, territorial y ambiental.

La jornada de trabajo tuvo al inicio una teleconferencia con Dennis Mwaniki experto en datos espaciales de ONU Hábitat, que desde la ciudad Nairobi detalló los criterios generales y la metodología consensuados a nivel global para caracterizar tipos de ocupación del suelo y los límites entre lo urbano y lo rural.

“…Los objetivos de esta armonización es superar las dificultades de la agregación de datos a escala nacional local y global, regional y global, que facilite la comparación entre áreas urbanas y rurales y generar una conceptualización común para definir áreas urbanas”, explicó el experto.

Esto se realiza en base a indicadores como densidad de población, porcentaje de suelo construido, imágenes satelitales e información censal. Así establece tres tipos de ocupación del suelo a partir de los cuales se definen ciudades, pueblos y suburbios y áreas rurales.

Adecuación nacional

En el caso de Uruguay la delimitación de áreas urbanizadas requirió de una adecuación a las características propias de nuestro país en cuanto a población y territorio. Por ejemplo, es el caso del grado de urbanización, en el que las grillas de 1 km x 1 km sugeridas por ONU fueron adaptadas a grillas de 100 m x 100 m.

Los técnicos de la Dinot explicaron que la adecuación metodológica a nuestra realidad tiene dos partes: por un lado obtener los datos de población en áreas edificadas y por otro caracterizar las aglomeraciones por densidad de población en áreas edificadas, cantidad de población y contigüidad.

Para cartografiar el suelo impermeable se utilizaron imágenes satelitales Sentinel con pixel de 10 x 10m del 2018. Y por otro imágenes Landsat, de 30 x 30m, y que a pesar de su menor definición tiene registros desde 1985 lo que permite trabajar con los datos censales y comparar la ocupación del suelo en el tiempo.

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