Tal declaratoria implica que habrá límites estrictos a distintas actividades humanas, aunque cabe recordar que actualmente ya hay muchas limitaciones y la gigantesca reserva de lobos marinos no se puede visitar libremente y solo hay viajes en barco hasta las proximidades.
El anuncio fue formulado este jueves 8 de junio en la Expo Uruguay Sostenible que tiene lugar en el Antel Arena, en Montevideo, por el subsecretario del Ministerio de Ambiente (MA), Gerardo Amarilla, al señalar que, “es importante para el país para la protección ambiental”.
Amarilla comentó que tuvo la oportunidad de conocer la Isla de Lobos y sumergirse en las aguas cercanas, donde nadan cientos de lobos marinos. “Es un antes y un después estar sumergido rodeado de lobos”, admitió el funcionario al anunciar que el área será declarada Área Marina Protegida.
Adelantó que ya se está preparando la audiencia pública, que significa desarrollar una instancia de información y participación pública consultiva sobre el proyecto para que la Isla de Lobos ingrese al Sistema Nacional de Áreas Protegidas (SNAP), y que lo inmediato es definir los límites del área.
El proyecto “Un solo mar”, integrado por organizaciones uruguayas y brasileñas, presentó en 2021 una iniciativa sobre áreas marinas protegidas al MA, mientras que al año siguiente el entonces titular de la cartera, Adrián Peña, habló de la posibilidad de ampliar esas áreas de un 0,7% al 10%.
La petición realizada por “Un solo mar”, incluía una superficie de unos 12.800 kilómetros cuadrados, abarcando desde la Isla de Lobos (Maldonado) a Cabo Polonio (Rocha), donde habitan inmensas colonias de mejillones y cetáceos. Otra propuesta abarcaba un área mucho mayor.
La idea local
El intendente de Maldonado, desde el periodo anterior de gobierno esboza la idea de desarrollar un proyecto turístico que potencie los atractivos de la isla, mediante visitas guiadas por técnicos donde se ponga de relieve la historia de las loberías, y los naufragios en la región, entre otros aspectos.
A lo largo de los años, Enrique Antía ha realizado varias visitas y reuniones junto a distintas autoridades uruguayas y extranjeras. El viernes 14 de enero del año pasado, el presidente de la República y algunos ministros, acompañado por el jefe comunal y otras autoridades visitó la Isla de Lobos.
Anteriormente, en octubre del año 2021, el Intendente de Maldonado se reunió por este y otros asuntos con el ministro de Turismo, Tabaré Viera, con el que analizó varias iniciativas pensando en la postpandemia, para volver a potenciar la industria turística que había sido fuertemente golpeada.
En 2019, el jefe comunal invitó al secretario general de la OMT, Zurab Pololikashvili, a visitar la Isla de Lobos, aprovechando que el jerarca extranjero se encontraba en aquel momento vacacionando por unos días en Punta del Este junto a su familia. El lugar sorprendió al número uno de la OMT.
El proyecto busca generar un polo de atracción para los turistas, que incluya un paseo a la reserva de lobos y sea dirigido por una ong especializada. El secretario general de la OMT, comprometió su apoyo con el envío de técnicos para poder crear un centro de investigación de desarrollo sostenible.
Antía, relató que coordinaba la idea con el técnico responsable en el manejo de mamíferos de la Dinara, Alberto Ponce De León, y que ya tenía elaborado un proyecto que hacía varios años había presentado incluso al último titular del Mtop del gobierno del FA, Víctor Rossi, que no prosperó.
La administración departamental está dispuesta a realizar una fuerte inversión en la Isla de Lobos, incluyendo un circuito histórico y una pasarela de madera que no afecte a los animales. Durante las obras, también se aprovecharía a reparar el histórico faro de 1906, que no se encontraba habilitado.
Pero a fines del mes de septiembre de 2015, el Intendente de Maldonado, en compañía de un grupo de técnicos, ya había visitado la Isla de Lobos y confirmaba que desde la comuna se planificaba invertir en un proyecto para la explotación turística de esta reserva lobera.
Aseguraba entonces que, en la isla no había nada y estaba todo por hacer, expresando que además de los paseos guiados se proyectaba realizar una especie de museo donde se relate la historia de los lobos, de la propia Isla, y los barcos hundidos que hay en la cercanía.
