La empresa Aborgama, construyó y opera la planta de captación y posterior quemado de biogás que, en su momento fue la primera de Latinoamérica. La Intendencia de Maldonado, autorizó la suscripción de un convenio con Ute en procura de ampliar la producción de energía eléctrica mediante ese sistema.

La planta de paraje Las Rosas, que produce electricidad a partir del biogás resultante de la descomposición de residuos domiciliarios, se encuentra en funcionamiento desde el año 2005 a cargo de la empresa Aborgama, en una zona rural ubicada al Norte de la capital departamental.

Cuenta con dos motores de 12 cilindros en línea a los que están acoplados dos generadores de 500 kilovatios de potencia nominal cada uno, alcanzándose los 1000 KW hora. Cada unidad tiene una antigüedad de 19 años, es decir que están operativas desde su puesta en funcionamiento.

La vida útil de estos equipos es de 25 años por lo cual Ute proyecta una serie de mejoras para renovar el acuerdo existente, cuya inversión asciende a los US$ 60.000. Del total, US$ 47.000 serán reintegrados por la empresa como pago de la energía inyectada a la red durante el periodo 2019-2023.

El acuerdo será por el plazo del actual gobierno departamental para luego extenderlo, con el visto bueno de la Junta Departamental, durante los 10 años propuestos por la peticionante. La planta de biogás de Las Rosas, en 2004 elevaba una potencia de 350 kw a la red de Ute, dirigida al abastecimiento de energía a clientes en San Carlos.

La técnica de “relleno sanitario”, por su característica de confinar miles de toneladas de residuos dentro del terreno, en un ambiente controlado, evita que se evacue el biogás en forma descontrolada a la atmósfera. Mediante un sistema de válvulas, bombas y cañerías se extrae el biogás generado por la natural descomposición de los desechos.

De esa forma se aprovecha el metano del biogás y se utiliza para generar energía eléctrica, con lo que no solo se consolida una nueva fuente de energía, sino que se impacta positivamente en el medio ambiente. El proceso de quemado de biogás, es 25 veces más saludable para la atmósfera que si ese gas fuera liberado.