El hecho ocurrió en jurisdicción de la seccional 5ª de balneario Solís en marzo del año pasado, cuando un Policía a bordo de un móvil, concurrió ante un llamado por la presencia de dos desconocidos desplazándose en bicicleta. Cuando los trasladaba porque no tenían documentos, le quitaron el arma, tomaron el volante de la camioneta e iniciaron una fuga que culminó cerca de Minas.

En las últimas horas fue trasladado a Maldonado, Leandro Mauricio Gómez López, de 38 años de edad, quien se encontraba prófugo desde el martes 8 de marzo del año 2016, cuando protagonizó una serie de hechos delictivos junto a un veterano delincuente que fue atrapado cerca de pueblo Edén.

Este lunes, Gómez López fue detenido por efectivos de Interpol Argentina en la ciudad de Buenos Aires, realizándose rápidamente los trámites pertinentes para ser trasladado a Uruguay. La mañana de éste martes fue llevado al Juzgado Penal de 2° Turno donde se encuentra declarando.

Los hechos

Los hechos comenzaron a gestarse a media mañana del martes 8 de marzo del año pasado, en balneario Solís, cuando un vecino llamó a la seccional 5ª de Policía, para advertir sobre la presencia de dos individuos en actitud sospechosa que se desplazaban en bicicletas.

Hacia el lugar fue un efectivo policial en una camioneta de la citada comisaría, interviniendo a los dos individuos que no pudieron exhibir documentos identificatorios, por lo cual fueron invitados a subir al móvil al tiempo que cargaron las bicicletas en la caja.

Dentro del móvil, los delincuentes encañonaron al Policía, lo desarmaron y partieron raudamente conduciendo la camioneta hacia la Ruta Interbalnearia, luego Ruta 9 al Este, tomando finalmente la Ruta 12 rumbo a pueblo Edén, entre las ciudades de Pan de Azúcar y San Carlos.

A esa altura, el resto de la Policía del departamento de Maldonado ya estaba advertida de lo que estaba sucediendo, por lo cual se inició un intenso despliegue hacia la zona y cierre de rutas cercanas, para evitar que pudieran llegar al departamento de Lavalleja.

Cerca de pueblo Edén, el efectivo policial secuestrado, temiendo que lo ejecutaran se lanzó imprevistamente de la camioneta, en tanto los delincuentes siguieron su alocada carrera, tiroteándose con personal de la seccional 4ª de Mataojo con jurisdicción en la zona.

Más adelante, el dúo de maleantes detuvo la camioneta policial, y encañonó a la casera de un establecimiento cercano, a la que tomaron como rehén y le robaron su camioneta Fiat Strada, para continuar la fuga por distintos caminos vecinales al Norte de pueblo Edén, en dirección a Minas.

Sabiéndose rodeados, los delincuentes optaron por abandonar a la mujer en el medio del campo junto a su camioneta, para emprender la fuga a pie entre las sierras. La Policía ya había saturado toda el área y contaba incluso con apoyo de un helicóptero.

Sobre mediodía, uno de los delincuentes fue atrapado con una herida de bala en el mentón; más tarde se confirmaría que se disparó a si mismo, posiblemente en un intento de auto eliminación, en tanto continuó la búsqueda de su compinche que nunca más pudo ser ubicado.

Se trataba de Leandro Mauricio Gómez López, quien fue buscado por no menos de 30 efectivos pie a tierra, en motos y camionetas, que contaban con apoyo del GEO, Plantel de Perros y un helicóptero. Los establecimientos rurales de la zona fueron advertidos ante la eventualidad de un copamiento.

El miércoles 9 de marzo, el Juez Penal de 2° Turno de Maldonado procesó con prisión a Roberto Santana Carballo (el delincuente atrapado herido), como autor de dos delitos de rapiña con privación de libertad (copamiento), y por un delito de atentado agravado en régimen de reiteración real.

Santana Carballo, de 66 años de edad, con mucha habilidad y viéndose rodeado en las sierras cercanas a pueblo Edén, decidió dispararse a sí mismo en el mentón, con el objetivo de provocarse una herida leve que obligara a la Policía a trasladarlo a un centro asistencial de donde podría fugarse.

Ya en manos de la Policía, durante los interrogatorios contó todos los detalles de los ilícitos cometidos a partir del momento que secuestraron al Policía de la seccional 5ª de balneario Solís y le robaron el móvil. También “quemó” a su compinche que logró fugar hacia Colonia y luego a Argentina.

Falso Policía

En el mes de mayo de 2003, la Policía de Canelones desbarató una banda que se valía de falsos uniformes policiales para consumar sus atracos. El último caso por el que se buscaba a varios delincuentes, ocurrió el 5 de abril de aquel año en un establecimiento del kilómetro 41 de Ruta 34, Salinas.

Ese día, personal de la seccional 22ª concurrió al lugar ante un alerta sobre un copamiento en proceso. Al llegar advirtieron la presencia de tres personas, dos de ellas vestidas como policías. El enfrentamiento se produjo cuando los verdaderos agentes quisieron saber quienes eran sus camaradas.

Allí se supo que eran delincuentes disfrazados, lo que desató la reacción de los policías que lograron detener a uno de ellos luego de un intercambio de disparos. Era Juan José González Ocampo, de 56 años, quien terminó en prisión imputado por “rapiña con privación de libertad en grado de tentativa”.

Este individuo, poseedor de varios antecedentes, había regresado desde Argentina días antes, acompañado por otro uruguayo, Santana Carballo. Ambos se asociaron con un tercero y decidieron reincidir en el delito, planeando su primer atraco para el 5 de abril de 2003 en el establecimiento de la Ruta 34.

El objetivo de la flamante banda era desvalijar la propiedad, para lo cual habían maniatado a una silla al sereno, de 75 años de edad, a quien también amordazaron. Sin embargo, la rápida llegada de los efectivos de la seccional 22ª frustró sus planes delictivos.

Finalmente, fueron detenidos y procesados con prisión los otros dos individuos integrantes de la banda. Se trataba de José Luis Risotto González, de 44 años de edad, y de Roberto Santana Carballo, quien por entonces tenía 53 años y un frondoso prontuario.