Un centenar de cuadros del extinto artista Carlos Páez Vilaró, fueron robados de su taller en la localidad de Tigre, provincia de Buenos Aires, según sus dos hijas mayores, Agó y Mercedes Páez Rodríguez, quienes radicarán la denuncia ante Interpol.
Según consigna el diario local Correo de Punta del Este, el faltante de un centenar de obras se detectó cuando se revisó el inventario de los bienes de Carlos Páez Vilaró en su taller de Tigre, Argentina, donde vive uno de sus hijos.
Mercedes Páez Rodríguez, una de las hijas mayores del artista, confirmó que se radicará la denuncia en Interpol de Argentina, a través del estudio del abogado González Díaz Cantón, para que se investigue lo que ocurrió y cuando.
“Papá había guardado toda la información de sus obras que tenía en El Tigre. La tenía guardada en un pendrive”, indicó la hija de Páez Vilaró. “Esas obras las dejó correctamente inventariadas”, como el resto de sus trabajos en Uruguay.
Según el matutino, cuando se comparó el contenido de la lista con lo que realmente había en el taller “nos percatamos que faltaban cien cuadros”. La viuda del artista, Annette Deussen, dio autorización respectiva para hacer el inventario.
“Cuando vinimos después de nueve meses de su muerte nos encontramos con que faltaban esa gran cantidad de obras”, agregó Mercedes Páez. En la casa de Tigre vive su hermanastro Sebastián, de 20 años, además de un casero y una secretaria que trabaja tres o cuatro veces por semana.
“Mi hermana Agó pudo entrar al taller recién nueve meses después que murió papá porque ninguno de los tres hermanos mayores estábamos autorizados por la viuda”, aclaró Mercedes, al tiempo de señalar que no ingresaron a la casa.
(Foto: María Eugenia Cerutti)