Según el informe de gestión 2014 presentado por el Sistema Integral de Protección a la Infancia y a la Adolescencia contra la Violencia (SIPIAV), durante el año pasado se registraron 1.728 situaciones de violencia hacia niños y adolescentes, casi 5 por día.

Según el informe del SIPIAV, el 54% de las situaciones de violencia las sufren las niñas, y el 47% los niños de entre 6 y 12 años; además, es la primera vez se tienen datos de niños de 0 a 3 años, que llegan al 9% del total de las situaciones registradas.

La coordinadora del SIPIAV, María Elena Mizrahi, explicó que del total de las situaciones de violencia registradas en el año 2014 en todo el territorio nacional, se contó con información completa de un total de 1.323 casos, lo que permite un análisis más profundo.

Destacó además, que este dato es el doble de los registros obtenidos en el 2012 y que con respecto al 2013 aumentó un 48%. Aclaró que este dato no implica que el fenómeno haya aumentado sino que se cuenta con mayor capacidad de registro en todo el país.

Tipos de violencia

Uno de los datos más relevantes tiene relación con el tipo de violencia registrada, que indica que la mitad corresponde al maltrato emocional, 22% al abuso sexual, 16% al maltrato físico y un 12% negligencia. En relación al año 2013, se visualiza una pequeña disminución del abuso (22% frente a 28%), pero se duplican las situaciones de negligencia (12% contra 6%).

Con respecto a la distribución por sexos según los tipos de violencia consignada, los porcentajes son relativamente similares en lo que respecta al maltrato emocional, físico y negligencia. En cambio, para el abuso sexual las tres cuartas partes corresponden al sexo femenino.

Analizando la frecuencia y cronicidad, en tres de cada cuatro situaciones registradas existió una recurrencia a la violencia, dato que se mantiene con respecto al 2013. Nueve de cada 10 situaciones son detectas en la fase crónica con un 88%.

Quienes agreden

En más de 3 de cada 4 situaciones, quien agrede es un familiar directo. En casi cuatro de cada diez, se trata del padre (39%); la madre es la perpetradora en el 27% de las situaciones; la pareja de la madre en el 15%, y solo en un 7% se trata de una persona que no integra la familia.

En lo que respecta al sexo de quienes agreden, se evidencia que son en su mayoría hombres (67%). La distribución por franja etaria establece que el 52% de los agresores tienen entre 30 y 44 años, el 22% de 45 a 59 años, y el 18% de 18 a 29 años.

Otro de los datos tienen relación con la convivencia que los niños y adolescentes mantienen con el agresor, el 65% vive con él, situación que para los profesionales que trabajan el tema, tiene evidentes consecuencias al momento de implementar medidas de protección.

Mizrahi reconoció que si bien las cifras son impactantes, forman parte de un fenómeno que siempre existió y que se visualiza cada vez con más frecuencia. Dijo además que las zonas de detección son los territorios y se considera “cajas de resonancia” a  los centros educativos.

Se han realizado mapas de rutas para Primaria y protocolos para Secundaria, ya que en esos ámbitos los niños y adolescentes encuentran referentes de confianza, que les permiten relatar situaciones de violencia intrafamiliar o de abuso para que puedan ser conocidas y abordadas.

También destacó la importancia del ingreso a los centros CAIF, a través de Uruguay Crece Contigo, lo que posibilitó reportar casos de violencia en niños de cero a tres años, considerada una etapa de gran vulnerabilidad.

El SIPIAV está presidido por el INAU, e integrado por el MIDES, MSP, ASSE, el Ministerio del Interior, y ANEP), contando además con el apoyo de UNICEF. El comité de gestión lo integran el Poder Judicial, el Ministerio Público y Fiscal, y organizaciones de la sociedad civil en convenio con INAU.