El viernes 1° de julio, se realizó el lanzamiento oficial de la primera edición nacional del Mes de la Afrodescendencia. El mismo se celebrará todos los años durante este mes y se enmarca en el Decenio Internacional de las Personas Afrodescendientes (2015-2024), una resolución adoptada por las Naciones Unidas.
La iniciativa pretende impulsar acciones conjuntas de organizaciones de la sociedad civil con organismos públicos y privados para abordar la afrodescendencia desde ámbitos como la educación, la academia, la política, el arte, la cultura y la economía solidaria entre otros.
El mes de julio fue seleccionado a propósito de la visibilización y reafirmación de fechas ya instaladas en la agenda nacional como el Día Internacional de Nelson Mandela y la conmemoración histórica del Día Internacional de la Mujer Afrolatinoamericana, Caribeña y de la Diáspora.
La creación de este mes temático estuvo a cargo del ministerio de Desarrollo Social en coordinación con las organizaciones de la sociedad civil y el Grupo de Trabajo sobre Políticas Étnico-Raciales. Ya se anunció que la celebración se repetirá todos los años en este mes.
Los avances
La titular del Mides, Marina Arismendi señaló que “hemos promovido acciones afirmativas, hemos llevado adelante todo tipo de actividades, pero queda mucho por hacer para combatir la discriminación y el racismo, que son formas que refuerzan la desigualdad social, la pobreza, la indigencia…”.
El embajador y director de la Unidad Étnico Racial del Ministerio de RREE y miembro del Grupo de Trabajo sobre Políticas Étnico-Raciales, Romeo Rodríguez, dijo que con el Mes de la Afrodescendencia se cumple una etapa de reflexión y análisis crítico sobre los avances registrados en los últimos 10 años.
“Concluyó una primera etapa de visibilidad de los temas. Ahora comienza un segundo desafío como la instalación del Consejo de Políticas Afrodescendientes y pensar en cómo abatir el racismo estructural y ver las deficiencias institucionales al instrumentar políticas”, afirmó Rodríguez.