El programa Playa Accesible cerró positivamente una temporada en la que también recibió un número muy importante de usuarios, a los que ofreció múltiples actividades recreativas y deportivas inclusivas, bajo la orientación de docentes y técnicos especializados.
Las playas accesibles, habilitadas tanto en Punta del Este como en Piriápolis, contaron con materiales especialmente adquiridos por la Intendencia de Maldonado, como 7 sillas anfibias que facilitaron el ingreso al mar de personas con discapacidad motriz.
También se incluyeron rampas, pérgolas, sombrillas, sillas de playa y alfombras, con una atención que estuvo dirigida a niños y adultos en situación de discapacidad, y también a adultos mayores independientes y grupos pertenecientes a centros especializados.
En Maldonado, Playa Accesible se implementó en las paradas 7 y 8 de la Playa Mansa, a donde concurrieron aproximadamente 200 usuarios provenientes de Maldonado y San Carlos, aunque también se sumaron turistas en situación de discapacidad de otras zonas del país y del exterior.
En Piriápolis, concurrieron 20 usuarios a la playa ubicada en la rambla De los Argentinos y calle Freire, provenientes de diferentes zonas como Pan de Azúcar, Kilómetro 110, La Capuera, Playa Hermosa y Piriápolis, además de turistas. La atención estivo a cargo de 3 docentes especializados.
Logística
En total, se realizaron 127 traslados de usuarios de Maldonado y 12 de Zona Oeste, a cargo de choferes de la comuna y uno perteneciente al Municipio de Pan de Azúcar. Además, el programa tuvo el apoyo técnico de directores, coordinadores, psicólogos y trabajadores sociales.
Por otra parte, se concretaron otras actividades paralelas, como una Jornada Inclusiva con propuestas recreativas y desfile inclusivo en la playa, a cargo de la ong Fortaleciendo en Valores; también hubo clases de surf a cargo de La Brava Surf School de las que tomaron parte 36 usuarios.
Con apoyo de Rotary International y Prefectura se sumaron actividades náuticas, en tanto en Piriápolis se realizaron paseos en lancha con el apoyo de Pablo Nizka. Hubo intercambio de fútbol playa con la Selección Uruguaya de Olimpíadas Especiales, así como con instituciones de Montevideo y Minas.