La Dirección Nacional de Medio Ambiente (Dinama), emitió informe favorable a la obra de construcción de la rambla de San Carlos, proyectada por la Intendencia Departamental. Así se informó este viernes al Municipio de la ciudad con la calificación A, que indica que no provocará impacto ambiental negativo alguno.

La Dinama informó al Municipio de San Carlos, que la obra de construcción de la rambla de la ciudad está calificada como A, lo que significa que no provocará impacto ambiental negativo alguno. Este certificado de clasificación del proyecto, es el paso previo al reglamento de evaluación de impacto ambiental.

La categoría A, en el Literal a) del Artículo 5, señala que "incluye aquellos proyectos de actividades, construcciones u obras, cuya ejecución solo presentaría impactos ambientales negativos, no significativos, dentro de lo tolerado y previsto por las normas vigentes".

Sin embargo, la obra no comenzará hasta tanto se dicte la autorización ambiental previa firmada por la titular del Mvotma, Eneida De León. Se trata de una de las mayores inversiones que realizará la administración departamental y que en su momento generó algunas polémicas en San Carlos.

El detalle

El proyecto prevé la urbanización de un frente panorámico al Este de la ciudad, en el semi espacio abierto de áreas públicas contiguas al álveo del arroyo Maldonado, y transcurrirá a lo largo de 3,1 kilómetros en tramos de 1.400 y 550 metros de plataforma nueva en la margen derecha del arroyo.

La iniciativa pretende además, vincular la Ruta 39 desde el Sur en un empalme diseñado como rotonda circular, con la zona Norte de la ciudad por la costa, presentando una trayectoria alternativa a la trama en damero, priorizando a quienes se desplacen caminando.

En su extremo Norte generará un acceso al entorno del conocido como “Puente Negro”, y una vinculación peatonal con la faja de tierras propiedad de AFE, que será integrada como un paseo peatonal mediante otro proyecto que se está elaborando en estos momentos.

La rambla ofrecerá facilidades para el esparcimiento, como una ciclovía y veredas de 5 metros de ancho, áreas de descanso señalizadas y espacios enjardinados. Tendrá una calzada de 9,5 metros de ancho, y un sistema de canales para la conducción de pluviales.

La obra incluye la extensión de varias calles de la trama urbana de San Carlos, en forma de terraplén para conectar con la nueva plataforma. La intervención incluirá las calles Joaquín Suárez, Ejido, Agorrody, Leonardo Olivera, Juan de Dios Curbelo, Vecinal 3 y continuación Maurente.

Asimismo, se construirá una nueva calle de servicio paralela a la Ruta 39 en la zona de complejos residenciales del Sur de la ciudad, y se readecuará y canalizará la compleja intersección de calle Tomás Berreta y la avenida Florencio Alvariza, mediante su semaforización.

En cuanto a los espacios verdes, en esta obra se encararán los recubrimientos con suelo vegetal de taludes y los fondos de canales, quedando los rubros de paisajismo, forestación, jardinería, y equipamiento para otro llamado a licitación que se librará oportunamente.