Un grupo de 23 familias que residieron durante décadas en la franja de servidumbre de líneas de alta tensión de UTE en el barrio San Antonio II, recibieron sus nuevas viviendas este martes. Todas pasarán a alojarse en el complejo Manzana M del barrio 14 de Febrero de Maldonado.

Las 23 familias que resultaron sorteadas éste martes, se afincaron en casos durante décadas en casas construidas debajo de líneas de alta tensión de UTE que atraviesan el barrio San Antonio II de Maldonado, con los riesgos sanitarios que ello conlleva.

El director general de Vivienda, Desarrollo Barrial y Salud, de la Intendencia de Maldonado, Alejandro Lussich, explicó que se les dio prioridad a estos vecinos porque “la zona representa un alto riesgo para la salud y no son condiciones de vida dignas”.

La actual administración realizó un censo de actualización en 2015 y determinó la reubicación de las 12 familias que se encontraban bajo las condiciones más precarias, en tanto hoy, se procedió a la segunda etapa del realojo con la adjudicación de otras 23 soluciones.

Se estima que para los primeros meses de 2018 se complete el realojo de éstas familias, culminando un proceso de muchos años que se inició en periodos anteriores de gobierno. Los vecinos que aún esperan por su casa, se afincarán en un complejo que está en fase de construcción.

En total son 53 familias que accederán a una solución mediante el Plan de Realojo del barrio San Antonio II desarrollado por la Intendencia de Maldonado. Lussich, aclaró que los beneficiarios “pagarán y aportarán al Fondo de Vivienda Social del departamento para que se puedan desarrollan nuevos proyectos”.

El jerarca, adelantó que la faja de servidumbre de las mencionadas líneas de alta tensión será parquizará, para evitar nuevas ocupaciones, atendiendo no solo la salud de la población sino los largos reclamos de UTE que en múltiples ocasiones advirtió del riesgo de vivir en esa zona.

Larga data

En julio de 2014, la Intendencia de Maldonado suscribió un convenio con el Mvotma para la reubicación de las 53 familias del San Antonio II. El gobierno nacional aportó fondos para la construcción de las viviendas, en terrenos cedidos por la comuna que, además, se encargó de la licitación.

El convenio se enmarcó en un plan de relocalización de asentados en terrenos inundables o contaminados. El asentamiento San Antonio II, se ubica en el denominado callejón de UTE, predio por el que atraviesan líneas de trasmisión de energía eléctrica de 150kv.

El proyecto, incluyó una propuesta de recuperación del predio liberado para uso público, de manera de evitar nuevas ocupaciones con fines habitacionales, y un cronograma para la demolición de las viviendas y la mejora de los espacios públicos.