El Ministro de Ganadería, Enzo Benech, resolvió este martes 13 ampliar la emergencia agropecuaria a Cerro Largo, Flores, Treinta y Tres, a zonas de Colonia, Florida, Rocha y Soriano, además de agregar áreas en Río Negro. La medida, destinada a paliar el déficit hídrico que afecta a productores familiares de ganado y de lechería, rige por 90 días.

La resolución se basa en un informe de la Comisión de Emergencias Agropecuarias, que analizó la situación derivada de la falta de lluvias que afronta el país. En ese marco, se identificaron las zonas afectadas, que comprenden todo el territorio de varios departamentos.

Es el caso de los departamentos de Cerro Largo, Flores, Treinta y Tres, las seccionales policiales números 3, 4, 9, 10 y 11, de Colonia; 4, 10, 11, 12, 13, de Florida; 1, 2, 3 y 11, de Río Negro; 2, 3, 4, 6, 9 y 10, de Rocha, y 1, 2, 3, 4, 5 y 9, de Soriano.

La emergencia abarca los establecimientos de productores familiares dedicados a la cría de ganado y a la producción lechera, que recibirán pellet de cáscara de soja para alimentar a los animales, en cantidades de hasta 180 kilos por unidad ganadera, 2 kilos por día por tres meses.

El 28 de febrero se había resuelto declarar la misma medida para Tacuarembó, Salto, Durazno y zonas de Artigas, Paysandú, Río Negro y Rivera. Solamente Maldonado y otros 4 departamentos no están comprendidos por el momento en la emergencia.

Los productores recibirán la ración a través de 120 organizaciones de las zonas establecidas, que deberán elevar la demanda a las 12 mesas de Desarrollo Rural, hasta el 2 de abril. El crédito al que accederán lo otorga República Microfinanzas S.A., con dos vencimientos: en julio de 2019 e igual mes de 2020.

El llamado total de compra por parte del ministerio alcanza a 10.000 toneladas de cáscara de soja, a un precio promedio de $ 6.700 por tonelada. El monto de inversión se conocerá en abril, luego de que cada demanda se oficialice.

Los beneficiarios deben estar activos en el Registro de Productores Familiares y no tener deudas de operativos anteriores con el Mgap. El nivel de buenos pagadores, en el caso de productores familiares, alcanzaba a 94% del total de los que habían recurrido a esta asistencia en 2016.

“Es un tema que tendrá impacto importante en los productores y en la economía, porque hay consecuencias irreversibles en la producción agrícola de verano, como en la cosecha de soja, maíz o sorgo, además de la propia cría del ganado y la remisión de leche”, advirtió Enzo Benech.

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