Un gran impacto sigue provocando en distintos ámbitos, la denuncia de discriminación sexual contra un efectivo policial que revistaba en la seccional 11ª de Piriápolis. Gremios y organizaciones piden al Ministerio del Interior que se expida rápidamente.
El caso de un policía gay que cumplía funciones en la seccional 11ª de Piriápolis, comenzó a conocerse muy tímidamente hace algunas semanas pero hoy ya está instalado en la opinión pública, que espera una respuesta del Ministerio del Interior.
La semana que queda atrás, el Sindicato Policial de Maldonado (Sipolma), exigió públicamente a la cartera que se expida, porque la denuncia del Policía contra un superior, es contundente; en tanto el funcionario fue trasladado a otra dependencia.
Para las autoridades del gremio policial de Maldonado, Interior “sigue defendiendo al superior”, sin tener en cuenta la grave denuncia del Policía, que acosado por actos discriminatorios y sanciones, decidió hacer público lo que estaba padeciendo.
Según el denunciante, el superior acusado de estos actos (un oficial), le expresó más de una vez que odiaba a los gay, y apenas tenía una oportunidad le aplicaba una sanción que, no le cabía a otros funcionarios por actitudes funcionales similares.
En la órbita del Ministerio del Interior, el caso habría ingresado a la Comisión de Género, aunque luego, se entendió que debía ser tomado por Asuntos Internos. Esto no sería lo correcto según Sipolma, porque Asuntos Internos está para investigar otro tipo de casos.
Desde el gremio, se advirtió que apelará a todos los recursos disponibles para que el asunto sea aclarado, antes de tener que llegar a presentar una denuncia ante la justicia. Incluso, ya recurrió a la Institución Nacional de Derechos Humanos (INDDHH).
Pero otras organizaciones también han alzado su voz, y reclaman una pronta definición en el ámbito del Ministerio del Interior, como el caso del Colectivo Ovejas Negras, que públicamente ha expresado su decidido apoyo a Sipolma en este asunto.
“Ante la denuncia de hostigamiento homofóbico hacia un efectivo policial de la Seccional 11ª de Piriápolis, el Colectivo Ovejas Negras manifiesta su rotundo apoyo a la solicitud de la Asociación de Funcionarios de la Jefatura de Policía de Maldonado (SIPOLMA) para que el Ministerio del Interior realice las investigaciones pertinentes y adopte las medidas necesarias para proteger a la víctima. Asimismo, expresamos nuestro absoluto respaldo a la denuncia presentada por el SIPOLMA ante la Institución Nacional de Derechos Humanos y Defensoría del Pueblo”, señala.
Ovejas Negras, agrega que, “repudiamos el tratamiento del caso que realizó el Ministerio del Interior. Este no emprendió acción alguna sobre el oficial que habría acosado al subalterno durante más de siete meses, pero sí ordenó, en dos ocasiones, el traslado laboral del perjudicado -primero a Pan de Azúcar y luego a Solís- sin consentimiento alguno de la víctima e inmediatamente después de que presentara la denuncia…”.
Por otra parte, Ovejas Negras reclama “el regreso inmediato del agente denunciante a la Seccional 11ª de Piriápolis y, mientras se realice la investigación pertinente, la separación del cargo del oficial al mando”, al tiempo de advertir que éste deberá ser sancionado en caso de probarse sus actos de discriminación.
“A su vez, instamos a las jerarquías del Ministerio del Interior que se pronuncien desde su rol institucional sobre este tema y den una señal inequívoca de que este tipo de excesos no serán tolerados en el Uruguay de hoy. La omisión en este caso equivale, lisa y llanamente, a la complicidad y a la legitimación del abuso”, concluye el comunicado del citado colectivo.