El gremio de la construcción en Maldonado mira con atención los avatares del sector, entre anuncios de proyectos que no terminan de concretarse, y situaciones de incertidumbre como la que está generando el tema del ex hotel San Rafael. El Sunca no descarta movilizarse para exigir respuestas de los inversores que hicieron pomposos lanzamientos.
Más allá del buen diálogo existente entre las máximas autoridades de la Intendencia de Maldonado y de la cúpula del Sunca a nivel departamental, con reuniones periódicas donde se aporta toda la información sobre la construcción en el departamento, los trabajadores están preocupados.
La pasada semana y tras una reunión con autoridades comunales, el presidente del gremio a nivel departamental, Alejandro Rodríguez, reconoció que el encuentro fue positivo en el sentido de que se pudo realizar un nutrido intercambio de información, aunque la realidad es preocupante.
Rodríguez dijo que en 19 obras en marcha, del paquete que fue aprobado con excepciones entre 2017 y 2018, hay entre 600 y 800 trabajadores ocupados. “Estamos lejos de la expectativa que teníamos”, porque las proyecciones de la Intendencia sobre miles de puestos de trabajo son a 3 años.
Alejandro Rodríguez explicó que 4.500 plazas podrán estar ocupadas en ese lapso y en el mejor de los casos, si todos los proyectos aprobados y avalados por la Junta Departamental, se ponen en marcha. Pero hay obras que comenzaron “muy lentas”, aseguró el dirigente.
En estos momentos, y a partir de información del Banco de Previsión Social (BPS), hay en total entre 3.500 y 4.000 obreros ocupados, pero un número un tanto superior está a la espera y se encuentra “en la vuelta”, según graficó el presidente del Sunca-Maldonado.
Este miércoles, el secretario general del gremio, Pedro Arismendi, también hizo sus evaluaciones durante una entrevista en el periodístico Frecuencia Abierta de Aspen FM de Punta del Este, donde anunció que no se descartan movilizaciones porque la situación es preocupante.
Respecto a la polémica generada en torno al ex hotel San Rafael, dijo que hay resoluciones en las que el movimiento sindical está al margen, porque pesan las decisiones políticas, y aseguró que si todo se hubiera dado con normalidad, en este momento había muchos más trabajadores ocupados.
“Siempre le dijimos al Intendente (de Maldonado) que hay que ser cauteloso con los anuncios”, porque hay gente en todo el país que inmediatamente se prepara para venir al departamento a trabajar, cuando la realidad indica que el sector aún se encuentra bastante estancado.
Pedro Arismendi advirtió que “se viene un invierno que no se arregla con los Jornales Solidarios” por lo cual analizan posibles movilizaciones para que la Intendencia de Maldonado convoque a los inversores que hicieron pomposos lanzamientos de sus proyectos pero no los han iniciado.
Entre los ejemplos que dio Arismendi, figura el anuncio de Enjoy Punta del Este que construiría varias torres en torno al actual edificio de la Parada 4 de la Playa Mansa, pero no se concretaron. Otro caso es el del WTC Punta del Este (sobre Gorlero) cuyos inversores pidieron más plazo para iniciar las obras.