Ni Salud Pública, ni las dos empresas privadas con servicio especializado de ambulancias en el departamento de Maldonado, cuentan con una base o al menos una unidad en esa ciudad. Cada vez que ocurre una emergencia o se produce un siniestro de tránsito, la llegada de una unidad es toda una incertidumbre. La carencia fue planteada en la Junta Departamental mientras, se inició una recolección de firmas solicitando una solución.
La ciudad de Pan de Azúcar está enclavada en medio de un importante cruce de rutas (Interbalnearia, rutas 9, 37 y 60), lo que multiplica varias veces la posibilidad de siniestros de tránsito en el área y durante todo el año, respecto a otras ciudades del departamento de Maldonado.
Sin embargo, la ciudad no cuenta con servicio especializado de ambulancia ni público ni privado, por lo que la asistencia más inmediata se brinda desde Piriápolis donde sí, las dos empresas privadas con servicios de estas características, tienen bases de operaciones.
No son pocos los testimonios que aseguran que los tiempos de espera han sido demasiado extensos en muchas ocasiones, en las que incluso se han registrado pérdidas humanas, y en procura de revertir esta situación, la población de Pan de Azúcar inició una campaña de recolección de firmas.
Al mismo tiempo, el tema comienza a tener repercusiones en otros ámbitos, como en la Junta Departamental, donde el pasado martes 23 el edil colorado Ignacio Garateguy, se refirió a la necesidad de contar con un servicio de ambulancia especializada para atender situaciones graves.
“Desde hace mucho tiempo en la zona de Pan de Azúcar y aledaños se vienen constatando demoras importantes en el arribo de los móviles de emergencia instalados con base en Piriápolis”, dijo Garateguy en el comienzo de su exposición vinculada a esta problemática.
“Los mismos (móviles) no pueden llegar a tiempo a esa zona, generando una sensación creciente de desprotección entre habitantes y visitantes, que en algunos casos han permanecido una hora esperando en las rutas y calles”, para obtener asistencia por distintas causales.
Ignacio Garateguy subrayó que en este escenario, hay una reclamo de la población para que la ciudad de Pan de Azúcar cuente con “una ambulancia especializada y pediátrica permanente (…) con una base que bien podría estar localizada en el anexo del hospital…”
Puntualizó que, “de preferencia perteneciente a la órbita pública del servicio SAME 105, dependiente de Asse, al igual que la que está instalada en La Capuera, pero que no sea privada, porque, de ser así, se supone -por parte de los vecinos, por lo menos- que, por razones empresariales, podría quedar inhabilitada”.
Dijo también, que sería importante desarrollar un programa de capacitación a la población en reanimación cardiopulmonar, “ordenamiento del tránsito en la ciudad, semáforos..., porque hay otros aspectos que contribuyen a evitar tantas pérdidas de vidas, como viene aconteciendo.
Datos
Garateguy, informó que en jurisdicción del municipio de Pan de Azúcar hay una población permanente cercana a los 10.000 habitantes, de los cuales aproximadamente 2.000 están en la franja de cero a 14 años, según datos del Observatorio Territorio Uruguay de la OPP.
Por otro lado, tan solo por la Ruta lnterbalnearia (transcurre a poco más de un kilómetro al Sur de la ciudad), “pasan un promedio de 12.900 vehículos por día y por la Ruta 9 una cifra similar, de acuerdo a los datos extraídos de los registros de la Corporación Vial del Uruguay”.