El barrio Jardines de Acuario, ubicado al Oeste de la ciudad de Maldonado, se sigue desarrollando -como otros tantos- a ritmo vertiginoso. Lo que hace una década estaba marcado por predios baldíos, hoy es otra creciente urbanización que ya genera muchos problemas a los vecinos. La calle Citrino no es una más, es clave porque conecta varias zonas de la capital.
La calle Citrino, de aproximadamente 800 a 900 metros de extensión, nace en barrio La Fortuna, atraviesa el barrio en desarrollo Jardines de Acuario, y cuenta hoy con al menos 80 casas de distintas características, varias en construcción y muy pocos predios que están libres de toda edificación.
Está enclavado en medio de los barrios Valle Di Saronno (al Oeste) y 4H (al Este), que también están en pleno desarrollo, con la diferencia que no cuentan con una vía de tránsito que resulte clave para conectar otras importantes zonas urbanizadas de la capital departamental.
Además, a pocas cuadras se ubica un importante colegio, próximo además a avenida Lussich (Ruta Perimetral) que también genera un importante movimiento en determinados horarios, y calle Citrino se transforma en salida rápida hacia Lausana (al Oeste), Pinares (al Este) y la costa (al Sur).
Pedidos y expedientes
Los vecinos de calle Citrino, a lo largo de los años han realizado múltiples gestiones ante distintas dependencias de la Intendencia de Maldonado, en procura de que al menos se realice un riego asfáltico y se instale algún dispositivo reductor de la velocidad, pero no han tenido respuestas.
En 2017 -cuando había mucho menos edificaciones que en la actualidad-, solicitaron la limpieza de la cercana cañada Curbelo, alumbrado público, árboles y la pavimentación de calle Citrino: la cañada fue limpiada y el alumbrado público mejorado, por lo demás no hubo respuesta.
En 2020, con el respaldo de decenas de firmas de vecinos del barrio, solicitaron nuevamente algún tipo de tratamiento en la mencionada vía de tránsito y dispositivos reductores de la velocidad, ya que cada vez se torna más peligroso movilizarse en la zona. En ambos casos se formaron expedientes.
El 22 de abril de este año, una vecina fue al propio despacho del entonces intendente interino de Maldonado, José Luis Rapetti para plantear cara a cara los problemas de higiene que generan verdaderas nubes de polvo provocadas por el tránsito, y hasta los problemas de salud que esto está generando.
En resumen, hay otro expediente en danza pero las respuestas siguen sin llegar. El último dato que recibieron los vecinos -a quienes ninguna autoridad atiene personalmente-, es que el petitorio está en Vialidad Urbana, donde dicen que se debe esperar “a ver si entra en un plan de pavimentación”.
MaldonadoNoticias visitó el lugar, dialogó con vecinos y pudo comprobar los problemas que atraviesan: autos, jardines, patios, veredas, todo, está cubierto por el polvo; el tránsito es intenso pero además se desarrolla a velocidad excesiva, y no hay banquinas ni veredas.
Hay problemas respiratorios en alguna persona producto de la constante presencia de polvo en el aire. Los vecinos recalcan que no están pidiendo carpeta asfáltica y ni siquiera cordón-cuneta, sino al menos riego asfáltico para mitigar el impacto del balasto removido así como reductores de velocidad.
(Fotos: Maldonado Noticias)