Representantes de Unidad Popular, estuvieron en Maldonado para sostener una serie de reuniones con distintas autoridades, a quienes les presentaron detalles del Plan Nacional de Vivienda que pretenden sea aceptado como solución a uno de los grandes problemas de los uruguayos.
Gonzalo Martínez, secretario y suplente del diputado Eduardo Rubio, dijo que el déficit en estos momentos se sitúa en las 80.000 viviendas, por lo cual es sustancial que se adopten medidas de fondo que puedan mitigar esa problemática que afecta a quienes tienen menos recursos.
Remarcó que en este tema, el Estado tiene que asumir el “papel protagónico”, aportando un 1% del PBI anual, exclusivamente para la construcción de viviendas, lo que pondría en marcha muchas otras actividades, además de generar miles de fuentes de trabajo.
Además, sostuvo que cada organismo del Estado podría aportar su cuota parte, como forma de que el esfuerzo sea compartido, ya sea UTE asumiendo la extensión de las redes eléctricas u OSE aportando agua potable y saneamiento, y hasta el ferrocarril transportando materiales.
Gonzalo Martínez entiende que la ley de incentivo a la construcción de viviendas de interés social no está dando el resultado que se buscaba, porque solamente brinda beneficios a los inversores, y luego no se refleja en los precios de venta de las unidades.
Remarcó que siguen habiendo franjas que no pueden acceder bajo ningún concepto a estas soluciones, por lo cual el déficit habitacional se mantiene. Dijo que según datos de la Facultad de Arquitectura, tierras hay suficientes, aunque son objeto de especulación inmobiliaria.
El proyecto de Unidad Popular, apunta al aprovechamiento de tierras improductivas públicas e incluso privadas que deberían ser expropiadas. Se preguntó cuantas tierras tendrá la Intendencia de Maldonado, en un departamento con un gran déficit de viviendas.
Finalmente explicó que el plan apunta a la construcción de 6.000 viviendas por año en aquel lugar del país donde se necesiten, lo que generará mano de obra a 15.000 trabajadores, que en muchos casos, ni siquiera deberían desarraigarse de sus lugares de origen.
(Foto: MaldonadoNoticias)
