El niño fernandino de 11 años, que desde comienzos de 2015 es asistido en el hospital Nationwide Children's de Columbus, Ohio, sigue aceptando el tratamiento al que es sometido para atacar siete tumores cerebrales. Empero, se decidió que este mes sea sometido a una nueva intervención quirúrgica para extirpar uno de ellos.
Como estaba previsto, el pasado 28 de septiembre el equipo de profesionales que asiste a Agustín en el hospital Nationwide Children's de Columbus, en Estados Unidos, le practicó estudios para evaluar los resultados del tratamiento al que es sometido.
El estudio (resonancia), arrojó resultados muy satisfactorios que fueron revelados a la familia unos tres días después, y que confirman la reducción de la mayoría de los tumores, pero también la necesidad de atacar uno de ellos mediante una nueva intervención.
En contacto con MaldonadoNoticias hace algunas horas, Carlos Cal, el papá de Agustín, confirmó que la intervención quirúrgica está prevista para el jueves 22 de octubre. Agustín ya sabe de esto y “lo tomó muy bien”, dijo Carlos, en tanto sigue asistiendo al colegio al igual que su hermanita Candela, de 5 años.
Carlos Cal, explicó que se le practicará una endoscopia de cerebro, que se trata de una intervención mucho menos invasiva que las tradicionales. El objetivo será poder extirparle un pequeño tumor de apenas unos milímetros, por recomendación de los médicos tratantes.
Según los datos aportados por el último estudio practicado a fines de septiembre, los siete tumores están más reducidos que en el mes de junio, pero el equipo médico consideró que el que se encuentra “activo”, debe ser definitivamente quitado mediante una endoscopía cerebral.
En tanto, Agustín sigue su tratamiento, recibiendo tres veces por semana Etopoxido, y dos veces por semana Herceptin, además de las vacunas de Sagamostrim que le suministran cada poco más de dos semanas para mantener altas sus defensas.
La familia del pequeño sigue confiando plenamente en el equipo que lo asiste y una vez más mira con optimismo los nuevos desafíos. Quien impulsa ese optimismo es el propio Agustín que se ve fuerte, contento y una endereza increíble para enfrentar los escollos.