La edil (s) Susana de Armas (Partido Colorado), expuso en la Junta Departamental de Maldonado, la necesidad de que la Policía de Maldonado cuente con más efectivos ante lo que denominó una creciente ola de rapiñas ocurridas en el departamento. En tal sentido, enfatizó que serán importantes las cámaras de seguridad que se prevé instalar, pero mucho más que se pueda prevenir el delito.
De Armas, comenzó exponiendo sobre la seguidilla de rapiñas que se han producido principalmente en la ciudad de Maldonado, refiriéndose puntualmente a las últimas ocurridas a fines de la pasada semana, en perjuicio de un supermercado mayorista y un vecino que arribaba a su casa.
También repasó hechos similares ocurridos en perjuicio de distintos comercios, que quedaron registrados en cámaras de video vigilancia cuyas imágenes fueron difundidas por varios medios. “Esto nos permite arribar a varias conclusiones: la primera, bastante evidente, es que esto ya no se trata de una sensación térmica, no es una impresión, es indudablemente una ola de rapiñas”.
“Cuatro rapiñas en dos semanas a tres comercios y otra a una persona de la que aparentemente sabían de antemano que transportaba una suma de dinero y la estaban esperando. Hasta el momento ninguna de las cuatro rapiñas ha sido aclarada”, enfatizó de Armas.
Hay recursos
Más adelante afirmó que no se puede negar que hoy la Policía “está equipada, tiene combustible, los efectivos cuentan con armas adecuadas, no parece existir mayor problema con los uniformes o con la cantidad de vehículos; sin embargo, todos vemos que hay más inseguridad”.
Sin embargo, recordó que cuando el Jefe de Policía concurrió a la Comisión de Seguridad y Derechos Humanos de la Junta Departamental, informó que Maldonado tiene actualmente la misma cantidad de efectivos que hace 20 años, lo que no mantiene relación con el crecimiento poblacional.
“La propia Jefatura entiende que necesita 500 efectivos más, de los cuales el Ministerio del Interior va a proporcionar 50, que van a ser destinados al área que atiende la violencia doméstica. Nadie duda de la necesidad que tal sector tiene en un departamento donde la organización familiar está desintegrada”, insistió.
Si bien reconoció que la red de cámaras de video vigilancia que se instalará en las principales ciudades, mediante un convenio en el que participa activamente la Intendencia de Maldonado, será de gran utilidad, remarcó que también se necesitaría de más personal para realizar el monitoreo.
“Si el personal de monitoreo es personal que se resta al que se dedica a marcar presencia en las calles, no sé hasta dónde esta podría ser una solución”, enfatizó, para luego hacer un comparativo de cuántas plazas se podrían cubrir con la millonaria inversión prevista.
“Nosotros no somos de los que pensamos que todo lo debe hacer el gobierno departamental. Las mismas cámaras, si se trata de una cuestión de seguridad pública, quien debería financiarlas debería ser el gobierno central, el Poder Ejecutivo”, advirtió Susana de Armas.
Finalmente, y entre otras consideraciones, reconoció que las cámaras pueden ayudar a “descubrir o a atrapar delincuentes después de cometido el delito”, pero no evitarán la ocurrencia los atracos o rapiñas. “Nosotros lo que queremos es que haya menos robos, no solo que atrapen a los ladrones después que robaron”, agregó.