Bajo el lema “Nosotros podemos, yo puedo”, este sábado 4 de febrero se celebra el Día Mundial de Lucha Contra el Cáncer. La jornada está orientada a generar conciencia sobre esta patología en cuanto a la prevención y el diagnóstico oportuno, además del apoyo a las personas que padecen la enfermedad.
Como en años anteriores, la Comisión Honoraria de Lucha Contra el Cáncer (miembro de la Unión Internacional Contra el Cáncer), se adhiere a la conmemoración, destacando la necesidad de trabajar desde la formulación de estrategias y políticas de control del cáncer por parte de cada persona.
En el mundo, el cáncer es una de las principales causas de morbilidad y mortalidad, y se prevé que el número de casos aumente de forma importante en los próximos 20 años. Por eso se plantea la importancia de crear entornos saludables; educar e informar sobre la relación entre el estilo de vida y el riesgo de cáncer; y buscar información, atención y apoyo.
También tomar conciencia en cuanto a que la detección precoz salva vidas, compartir experiencias en referencia a la superación de esta enfermedad; y brindar ayuda al resto de las personas que padecen esta enfermedad; entre otras recomendaciones.
En Uruguay, el cáncer es la segunda causa de muerte después de las enfermedades cardiovasculares, siendo responsable de casi un cuarto (24%) del total de las defunciones registradas por año, según información divulgada por el Ministerio de Salud Pública (MSP).
Cada 4 de febrero -designado como el Día Mundial Contra el Cáncer por la Organización Mundial de la Salud (OMS)- el Centro Internacional de Investigaciones sobre Cáncer y la Unión Internacional Contra el Cáncer (UICC), convocan a unirse para profundizar la lucha contra el cáncer.
El MSP, ha definido como uno de sus objetivos sanitarios priorizados para el quinquenio, la reducción de la mortalidad por cáncer. Alcanzar ese objetivo requiere el desarrollo de un plan de acción integral con énfasis en la prevención primaria, el diagnóstico temprano y el tratamiento oportuno.
Datos importantes
Un tercio de los cánceres más frecuentes son evitables, mediante la adopción de estilos de vida saludables, que incluyen no fumar, evitar el consumo problemático de alcohol, el sedentarismo, la obesidad y la exposición solar irresponsable, por ejemplo en ésta época del año.
Además, la realización periódica de estudios de PAP y mamografía en la mujer y el test de sangre oculta en materia fecal (ejemplo el fecatest) en ambos sexos, de modo de prevenir los cánceres de cuello uterino, mama y colorrecto. Estos controles periódicos son la manera más efectiva de salvar vidas.
