Para alcanzar posturas comunes con miras a la Cumbre sobre los Sistemas Alimentarios de las Naciones Unidas, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA), y el Programa Mundial de Alimentos (WFP, por sus siglas en inglés) crearon una nueva alianza.
La cumbre, convocada por el Secretario General de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, para impulsar una profunda transformación de los sistemas alimentarios, reunirá a los jefes de Estado y de Gobierno de todos los países miembros de las Naciones Unidas en Nueva York, en septiembre de 2021.
Para preparar una sólida participación de América Latina y el Caribe, la FAO, el FIDA y el WFP establecieron una nueva alianza para reunir insumos e impulsar debates sobre la transformación de los sistemas alimentarios, lo que permitirá identificar problemas y oportunidades comunes en los países de la región.
Esto permitirá crear una agenda regional para llevar a la Cumbre sobre los Sistemas Alimentarios y también a la pre-cumbre, programada para julio de este año en Roma.
“¿Cómo podremos asegurarnos de que todos y todas puedan comer mejor y más saludable, manteniendo una producción ambientalmente sostenible y climáticamente resiliente? El futuro, no solo de la alimentación y de la agricultura, sino del bienestar y la sobrevivencia de nuestra especie, se juega en buena medida en la respuesta que podamos dar a esta pregunta, y en los acuerdos que logremos durante esta Cumbre”, dijo Julio Berdegué, Representante Regional de la FAO.
“Nuestros sistemas alimentarios sufren por los efectos del cambio climático y multitud de inequidades sociales que el COVID-19 ha agravado. La agricultura familiar produce hasta el 80% de los alimentos en nuestros países. Sin ella, no se puede garantizar la seguridad nutricional y alimentaria. Sin embargo, es un sector desatendido. A pesar de su vulnerabilidad al cambio climático, sólo recibe el 1,7 % del financiamiento destinado a luchar contra este fenómeno. Debemos cambiar este desequilibrio”, dijo Rossana Polastri, directora del FIDA para América Latina y el Caribe.
Por su parte, Miguel Barreto, Director Regional del WFP afirmó que, “nuestro objetivo debe ser construir sistemas alimentarios más resilientes y robustos, que puedan resistir el aumento de la volatilidad y los choques climáticos mientras siguen brindando alimentación sana, sostenible y asequible para todos y que, a su vez, garanticen medios de vida dignos para los productores del sistema alimentario”.
Diálogos regionales
Las agencias realizarán tres diálogos regionales en modalidad en línea: el primero se realizó el 27 de mayo y estuvo centrado en el fortalecimiento de los vínculos en los sistemas alimentarios, a través de alianzas innovadoras entre la agricultura local y la alimentación escolar.
El segundo diálogo, el 16 de junio, ahondará en las convergencias productivas para mejorar la resiliencia del sector agroalimentario y para impulsar el financiamiento al desarrollo, mientras que el tercero buscará establecer sinergias rurales, tendiendo puentes entre políticas sociales y de inclusión productiva, mediante la innovación digital y la tecnología y tendrá lugar el 23 de junio.
La nueva alianza de trabajo entre la FAO, el FIDA y el WFP permitirá mejorar el apoyo técnico que prestan estas tres agencias de Naciones Unidas a los países de América Latina y el Caribe en la realización de los distintos diálogos contemplados en la Cumbre.
*) La FAO es la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura y es la agencia especializada que lidera el esfuerzo internacional para poner fin al hambre. Su objetivo es lograr la seguridad alimentaria para todos y al mismo tiempo garantizar el acceso regular a alimentos suficientes y de buena calidad para llevar una vida activa y sana.
Con más de 194 Estados miembros, la FAO trabaja en más de 130 países. Todos podemos desempeñar un papel importante en la erradicación del hambre y la malnutrición.
En Uruguay, nos enfocamos en apoyar el cumplimiento del Derecho a la Alimentación Adecuada; avanzar hacia un sistema alimentario sostenible; acompañar la intensificación de la producción agropecuaria, reduciendo la brecha entre sectores urbano y rural y preservando los recursos naturales.
Por más información: http://www.fao.org/uruguay