Como y porqué el millonario empresario inmobiliario argentino Eduardo Costantini, decidió desarrollar un emprendimiento de lujo en medio de la nada, sobre un campo erosionado recostado sobre una costa oceánica furiosa. Porqué decidió sin titubeos aportar una decena de millones de dólares para construir un puente único, que por décadas fue soñado pero nunca concretado. En la siguiente entrevista exclusiva sostenida por MaldonadoNoticias con Costantini, conozca como un deportista, desde el mar y corriendo olas, pudo ver lo que otros no vieron.
En entrevista exclusiva con MaldonadoNoticias, el millonario empresario argentino Eduardo Costantini, narró como y cuando conoció el lugar donde se decidió a desarrollar el emprendimiento Las Garzas, en la costa del departamento de Rocha pero a solo 15 minutos del exclusivo balneario José Ignacio, en Maldonado.
“Yo amo Punta del Este, hace más de 40 años que vengo; estoy en el mar porque empecé haciendo windsurf y ahora kitesurf; conozco toda la costa Brava, porque yo empecé en la Punta, luego San Rafael, después La Barra, después Bikini, Punta Piedras y conozco José Ignacio”, narró.
Pero en José Ignacio no terminó su pasión por las olas, sino que quiso ir más lejos, y desafiar las bravas aguas de una costa rochense apenas salpicada por algunas escasas construcciones, con eje sobre una deteriorada Ruta 10, que hoy no muestra demasiados cambios.
“A través de la balsa, descubrí que hay una franja marítima donde la ruta se separa del mar, a esta altura 1.500 metros, y además hay 17 metros de diferencia entre la Ruta 10 y el mar; un campo quebrado, con las cárcavas que produce un accidente muy atractivo y le dan un movimiento a la fracción”, reveló en la charla.
Así, Eduardo Costantini descubrió 240 hectáreas con casi 2 kilómetros de costa, donde imaginó un lugar reservado para los más exigentes, que hoy se llama “Las Garzas”, una especie de gran barrio privado que goza de amplios espacios en un cuidado campo, y un mar embravecido al alcance de la mano.
“Es un paraíso donde en toda la bahía lo máximo que puede haber son 2.400 casas. Es un área preservada, cuidada, y de esa manera las regulaciones dieron respuesta a las inquietudes de parte de la población que estaba preocupada por el impacto que el puente podía originar en la urbanización”, acotó Costantini.
El emprendimiento “Las Garzas”, para el empresario argentino, “fijó el estándar mínimo de calidad y de cuidado del medio ambiente, porque en el área ésta primero la ley dice que se puede desarrollar solo el 35%; cada desarrollo tiene que dedicar el 50% a áreas verdes”, enfatizó.
El desarrollo “dedica” el 50% de su superficie a áreas verdes, incluyendo la amplia red de circulación interna, las cárcavas (socavones producidos en las zonas de pendiente a causa de corrientes generadas por las lluvias) y otros espacios parquizados. Cada terreno no puede tener menos de 2.000 metros.
“Si vos comparás (sic) con urbanizaciones anteriores, y Rocha es un ejemplo porque toma la experiencia de esos desarrollos y hace una cosa totalmente superadora en términos de la sensibilidad por el mantenimiento del medio ambiente. Además, las casas no pueden tener 7 metros de altura”, explicó.
“No se permiten edificios, entonces es un área totalmente resguardada, preservada, y va a ser precisamente la distinción y el valor que va a tener toda esta inmensa bahía”, complementó, revelando su orgullo por apuntar a lo diferente y a la excelencia en un rincón paradisíaco de la costa uruguaya.
El sueño del puente
Dijo que en el año 2008 pensó en la idea de concretar un puente sobre Laguna Garzón, que pudiera unir por la costa la icónica ciudad de Punta del Este y el exclusivo balneario José Ignacio, con una de las costas oceánicas más agrestes, ya no solo del vecino departamento de Rocha, sino del país.
“En el 2008 cuando descubrimos Rocha, aunque en realidad lo conocía desde principios del 2000, pero cuando se dio la oportunidad de hacer un desarrollo, nos contactamos con Artigas Barrios en ese momento; y nos informó que después de 35 años estaban alineadas las autoridades de los departamentos de Rocha, Maldonado, y el gobierno nacional en la conveniencia de construir un puente”, dijo.
Fue a partir de ese momento que hizo público su compromiso de financiar la obra, firmando un acuerdo que valoró como “histórico” entre Consultatio Las Garzas -su desarrollo inmobiliario en la costa rochense- y las dos intendencias con jurisdicción en la zona. Fueron los primeros pasos de un anhelo largamente postergado.
“Después llevó 2009, 10, 11, 12, 13 y 14, 6 años en la aprobación final de la construcción, y Consultatio Las Garzas lo construyó en un año; fue casi en tiempo récord para llegar a esta temporada”, narró orgulloso en el propio desarrollo, donde recibió este martes a invitados especiales y algunos medios de prensa.
Eduardo Costantini, aseguró que para la zona la conectividad es muy importante, dejando entrever que el puente que financió y que ha quedado librado al uso público, es solo parte de una red que deberá mejorarse. Reconoció que hay un proyecto para construir un aeropuerto en la zona.
“Yo creo que ahora tenemos que pelear por el asfalto de la Ruta 10; hay que pedirle a los otros desarrolladores que así como nosotros hicimos el puente, ellos contribuyan con el asfalto, que, precisamente, le da conectividad a través de la costa para el acceso a Rocha”, reclamó.
En estos momentos, la Ruta 10 se encuentra en inmejorables condiciones solamente sobre territorio del departamento de Maldonado. Del puente hacia Rocha, su estado es precario y demanda permanentes trabajos de mantenimiento a la comuna rochense.
“El puente tiene que derramar en todo el departamento de Rocha; eso es lo que el Intendente Artigas Barrios vio desde un comienzo”, recalcó, haciendo un sutil pero directo reclamo a otros empresarios que desarrollan distintos proyectos en la misma zona de “Las Garzas”.
Afirmó que con otros emprendedores ha conversado sobre estos temas porque los conoce, “pero la realidad es que ellos no quisieron financiar el puente, pues sabían que nosotros lo íbamos a hacer sí o sí igual. El puente salió cuatro veces más caro y no pusieron una moneda, entonces ahora que se pongan las pilas con el asfalto”, subrayó.
“Ni siquiera contribuyeron en la segunda balsa que durante cinco años puso Consultatio Las Garzas; puso toda la plata para el personal, para la balsa, para los motores, para el conteiner de los chicos que están trabajando ahí. Es la realidad, es la pura verdad”, reveló con tono más ácido.
Reconocido
Sin embargo, para Eduardo Costantini el esfuerzo personal da sus frutos. Primero porque tiene claro que su inversión inmobiliaria está siendo exitosa, y por el otro, porque está cosechando el reconocimiento de autoridades de dos departamentos y del propio gobierno nacional.
“Nosotros en todos nuestros proyectos, tanto acá como en Argentina, como en Estados Unidos, en Miami, siempre vamos a través de los permisos, dialogando con los vecinos, con las autoridades porque creemos en esa articulación pública-privada, y no creo que haya un antagonismo”, explicó.
“Siempre hay una solución equidistante para todas las partes, y eso te lleva a una dimensión distinta que a la postre te produce mayor satisfacción, el reconocimiento de la gente y la confianza”, lo que también, reveló, le ha dado Uruguay por su democracia plena.
“Yo lo que admiro de Uruguay es, como ustedes saben la alternancia del poder, es decir, no le hacen trampas a la democracia. Y eso es muy importante, en Argentina es mucho más difícil, siempre los cambios de gobierno son traumáticos; los presidentes están abulonados a la silla y no se quieren ir. En cambio acá no, hay alternancia del poder”, explicó.
“Uno puede decir que es más deliberativo Uruguay, que es más lento, pero por lo menos evita excesos y eso es algo que yo reconozco y admiro: la madurez democrática que tiene Uruguay, y en este acto lo vimos también. La sucesión de distintos intendentes, distintos ministros, con la presencia del ex Presidente José Mujica; todo eso es reconfortante”, reconoció en el final de la entrevista.
(Foto/Video: MaldonadoNoticias)