Unos 300 expertos, industriales, ingenieros de alimentación y conferencistas de varios países, participaron durante dos jornadas en el 2° Congreso Iberoamericano de Ingeniería de Alimentos, celebrado en Punta del Este.

Punta del Este fue sede del 2° Congreso Iberoamericano de Ingeniería de Alimentos, que reunió a profesionales y técnicos especializados en industrias agroalimentarias, directores y gerentes de empresas químicas y farmacéuticas, así como proveedores, científicos y universitarios.

Bajo la consigna “Ingeniería de Alimentos: nuevas tendencias y aplicaciones”, durante dos jornadas, expertos en la materia compartieron casi 300 trabajos y estudios sobre las tendencias y los últimos avances nacionales e internacionales en materia de ingeniería y tecnología de alimentos.

Fue una plataforma de debate entre el mundo de la investigación, el entorno industrial y la administración, en aquellos temas que preocupan a la industria alimentaria, tales como sostenibilidad, calidad y seguridad alimentaria, diseño y producción industrial, y alimentación y salud.

El evento estuvo dirigido especialmente a directores de I+D, producción y calidad, así como a profesionales técnicos especializados de industrias agroalimentarias y afines; gerentes y directores de empresas agroalimentarias, químicas y farmacéuticas, así como sus proveedores.

También a investigadores procedentes de distintas universidades, cuyo campo de trabajo y experimentación está relacionado con la Ingeniería y Tecnología de Alimentos; científicos y tecnólogos de alimentos de centros públicos y privados de investigación.

Conformes

Ignacio Vieitez, ingeniero de Alimentos, doctor en Química e integrantes del ‎Departamento de Ciencia y Tecnología de Alimentos de Facultad de Química de la Udelar, destacó que se presentaron casi 300 trabajos, y reconoció que el número de participantes creció exponencialmente respecto a la primera edición de 2012.

Explicó que la organización prevé que este Congreso Iberoamericano se siga realizando con una frecuencia de 3 a 4 años, porque el objetivo es conformar programas atractivos para todos los involucrados en la temática y lograr la presencia, como esta vez en Punta del Este, de destacados disertantes.

Vieitez agregó que la innovación y el desarrollo no tienen el impulso que los ingenieros quisieran, por lo cual este tipo de eventos son importantes porque propician los intercambios entre todas las partes involucradas al tiempo de generar herramientas útiles para el sector industrial.

Alejandra Medrano, ingeniera de Alimentos y vice presidenta de la Asociación de Ingenieros Alimentarios del Uruguay (AILALU), consultada sobre los desafíos de la industria alimenticia local, dijo que Uruguay es un país productor de muchos alimentos y tiene un potencial muy grande.

De acuerdo a lo expuesto durante las dos jornadas de trabajo, nuestro país “está creciendo mucho” en la producción de alimentos, por lo cual “la idea es apuntar cada día a alimentos más inocuos, alimentos con mejor valor nutricional y de mejor calidad”, tanto para la población local como para la exportación.

Medrano subrayó que la ingeniería de alimentos aunque poco conocida, es muy importante, y consideró que puede aportar mucho, ya que puede intervenir desde la producción primaria a la final de cada alimento, lo que significa participar en todo el proceso de la cadena.