El sujeto de 46 años fue detenido poco después de la agresión, por causas no informadas, perpetrada en la zona de prostíbulos de Maldonado. En San Carlos, un sujeto que borracho se presentó en la comisaría, donde provocó una serie de desórdenes, fue enviado 4 meses a prisión.

Días atrás en horas de la madrugada, un móvil policial concurrió a la intersección de calles Simón del Pino y Colonia (zona de prostíbulos y whiskerías), en el barrio Scalone de Maldonado, luego de recibir información sobre la presencia de un adolescente herido de arma blanca.

El menor de 17 años presentaba un corte en el labio inferior, por lo que en forma inmediata fue trasladado al hospital Elbio Rivero donde fue asistido. En tanto, otros efectivos policiales comenzaron a trabajar en procura de ubicar al agresor que ya había sido identificado.

A unas ocho cuadras del lugar del hecho, en avenida Aiguá y calle Cruzada Libertadora, fue detenido quien resultó ser Virgilio Fabricio Rocha Pereira, de 46 años, el que sin ofrecer resistencia entregó a los uniformados el elemento cortante que había usado en la agresión.

Trasladado a dependencias policiales, desde donde se dio cuenta de lo actuado a Fiscalía, Virgilio Rocha Pereira fue llevado ante la Justicia, donde le impusieron como medida sustitutiva, la prohibición de acercamiento y/o comunicación con el adolescente por el plazo de 60 días.

Desacatado

A todo esto, un sujeto que alcoholizado provocó un desorden en dependencias de la seccional policial 2ª de la ciudad de San Carlos, fue condenado a 4 meses de prisión efectiva, como autor de un delito de desacato, tras hace caso omiso a los pedidos para que se retirara.

El particular incidente ocurrió el viernes 3 de agosto cuando Sergio Marcelino Pereyra, de 40 años y poseedor de antecedente penales, irrumpió en la citada dependencia policial totalmente borracho y comenzó a insultar al efectivo que se encontraba en la guardia.

Los policías lo consultaron calmadamente si necesitaba algo y lo invitaron a retirarse en varias oportunidades. Sergio Marcelino Pereyra no solamente no se retiró, sino que comenzó a proferir insultos y a amenazar con romper la puerta de vidrio, por lo cual fue intervenido.

Posteriormente se dio cuenta de lo ocurrido a la Fiscalía, quien tomó cartas en el asunto y más tarde dispuso que el iracundo sujeto compareciera ante la Justicia, donde terminó imputado por un delito de desacato y enviado a la cárcel de Las Rosas por el término de 4 meses.

A fines del mes de marzo del año pasado, este mismo sujeto había sido remitido a la cárcel por última vez, por un delito de hurto agravado por ser sobre cosa expuesta al público. Había robado una bicicleta que se encontraba frente a un comercio de calle Agorrody, en San Carlos.