Un sujeto de 26 años, que como medida sustitutiva a la prisión portaba tobillera electrónica tras ser condenado en septiembre del año pasado por reiterados delitos de violación de su propia hermana, rompió el dispositivo y nuevamente fue enviado tras las rejas, por cuatro meses.
El miércoles 11, el Juez Penal de 4° Turno de Maldonado condenó a J.L.F.F., de 26 años, a 4 meses de prisión efectiva como autor penalmente responsable de un delito de daño agravado, tras romper la tobillera electrónica que portaba para evitar el acercamiento a su hermana de 12 años.
Este sujeto, había sido denunciado en el mes de febrero del año pasado, momento desde el cual tuvo medidas de restricción. Meses después, la Justicia lo condenó por reiterados delitos de violación y cumplió prisión preventiva durante 60 días hasta que se dictara sentencia definitiva.
Repudiable
La investigación en torno a este caso se inició cuando un médico del hospital Elbio Rivero de Maldonado, denunció ante la Unidad Especializada en Violencia Doméstica y de Género de Maldonado (UEVDG), un posible caso de abuso sexual en perjuicio de una niña de 11 años.
Según los datos aportados por el profesional, el victimario sería el propio hermano, quien estaba a cargo de la niña; luego, se sumó la denuncia de un familiar de ambos, hasta que se lograron elementos suficientes para que un Juzgado de Familia dispusiera las primeras medidas.
Mientras el caso continuó siendo investigado, el imputado, identificado como J.L.F.F., quedó impedido de acercarse a un radio inferior a los 500 metros de la niña, o comunicarse con ella por cualquier vía, todo lo que fue cumplido según el seguimiento realizado por la Policía.
El 19 de septiembre de 2018, el Juez Penal de 4° Turno se expidió, condenándolo a 60 días de prisión preventiva, como autor de reiterados delitos de violación especialmente agravada. Por otra parte, le fue suspendido el ejercicio de la patria potestad sobre su pequeña hermana.
La prisión preventiva para el depravado -que hoy cuenta con 26 años-, cesó el 18 de noviembre del año pasado, tras lo cual la Justicia dispuso que debía portar tobillera electrónica, de manera de poder controlarlo y evitar el acercamiento a la víctima que actualmente tiene 12 años.
También quedó inhabilitado para ejercer funciones públicas y/o privadas en el área educativa, de la salud y todas aquellas que implicaran trato directo con niñas, niños y adolescentes, personas con discapacidad y personas mayores en situación de dependencia, por un lapso de 10 años.
A pesar del privilegio de portar tobillera electrónica y no estar en prisión como responsable del grave delito cometido, el martes 10 de septiembre la Policía fue alertada de que el dispositivo electrónico (tobillera) de J.L.F.F. se encontraba fuera de servicio por haber sufrido daños.
En forma inmediata, personal de la Unidad Especializada en Violencia Doméstica y Género (UEVDG) de Maldonado se dirigió al domicilio de este hombre, el que fue detenido. Se informó de los hechos a Fiscalía que dispuso una serie de diligencias y su posterior comparecencia ante la Justicia.