Se trata de quien piloteaba la moto que el 28 de junio pasado, chocó con un móvil policial cuando se realizaba una tenaz persecución de varios sujetos que se sospechaba eran autores de una ola de rapiñas y arrebatos, cometidos contra mujeres en distintas zonas de Punta del Este.
La Jueza Penal (s) de 11° Turno, formalizó a un adolescente de solamente 15 años, por la presunta comisión de una infracción grave tipificada por la ley penal como dos delitos de receptación, por lo cual deberá cumplir arresto domiciliario nocturno por 30 días, en tanto está suspendido el proceso.
El adolescente, estaba requerido desde fines del mes de junio cuando la Policía de Maldonado comenzó a desbaratar una banda de adolescentes y jóvenes que con base en el asentamiento Kennedy de Punta del Este, estaría cometiendo una serie de arrebatos y rapiñas en distintas zonas.
Días atrás, fue intervenido por la Policía cuando ingresaba en el horario de visita a un establecimiento carcelario de Montevideo. Tras realizarse las comunicaciones y coordinaciones pertinentes, fue conducido a Maldonado donde tras pasar por Fiscalía, compareció ante la Justicia.
Como lo informara MaldonadoNoticias, la mañana del viernes 28 de junio hubo dos arrebatos y una tentativa de rapiña, en distintas zonas de Punta del Este, lo que desató un importante operativo policial en persecución de los sospechosos que circulaban en dos motos.
Móviles del GRT y de la URPM del Distrito 2 que operaban en la zona avistaron dos motos con cuatro ocupantes que se dieron a la fuga, aunque minutos después fueron localizados en la zona de El Jagüel, donde se inició una persecución que culminó en camino Aparicio Saravia.
Una de las motos habría intentado esquivar un móvil pero terminó estrellándose frontalmente con otro, sufriendo los ocupantes del birodado diversas lesiones. El piloto era el adolescente de 15 años, y su acompañante, un joven de 20 años; ambos fueron trasladados a centros asistenciales.
Posteriormente y mientras se realizaban los peritajes por el choque entre la moto cross de los delincuentes (que luego se confirmó era robada), se presentaron ante la Policía otros dos adolescentes, confesando que eran los ocupantes de la otra moto que se había fugado.
Admitieron, para sorpresa de los policías, que habían sido los autores de varios de los hechos que se estaban investigando, por lo cual fueron intervenidos y trasladados a dependencias de Investigaciones del Distrito 2, donde revelaron detalles de los delitos que habrían cometido.
Dijeron que la Yamaha Crypton la habían dejado en el asentamiento Kennedy y que un arma de fuego la descartaron en la misma zona. A pesar de la confesión, que luego no ratificaron ante el Fiscal Schubert Velázquez, por asesoramiento de su abogada, ambos fueron dejados en libertad.
Por este mismo caso, el miércoles 4 de septiembre, fue condenado a 10 meses y 20 días de arresto domiciliario, quien fue identificado como M.B.S., de 20 años, como autor de un delito de hurto especialmente agravado. El delincuente es de Montevideo y allí cumple la pena.
Estaba requerido desde fines de junio por el robo de la moto, ocurrido a la altura de calle San José y avenida Acuña de Figueroa, frente a un centro de salud de la capital departamental. De acuerdo con lo dispuesto por la Justicia, cumple el arresto domiciliario en su casa de Jardines del Hipódromo.