Uno de los robos abortados se producía en la calle Zufriategui de Piriápolis, donde la Policía atrapó a dos individuos; y el otro en Ocean Park donde también la Policía detuvo al autor antes que se fuera del lugar.

 

Uno de los casos se registró la madrugada del jueves 12 en la calle Pablo Zufriategui de la ciudad de Piriápolis, y fue puesto en conocimiento de la Policía en el preciso momento que se registraba un robo en una finca del lugar.

Cuando los primeros efectivos llegaron a la dirección indicada, constataron la rotura de un ventanal y el forzamiento de la puerta principal de una finca; casi al mismo tiempo, dos desconocidos fueron sorprendidos cuando salían con el botín.

Detenidos y llevados ante la Justicia, un individuo de 27 años cuya identidad no se conoce, fue condenado a 10 meses de libertad vigilada como autor de un delito de hurto especialmente agravado, en grado de tentativa.

El frustrado ladrón, fijó domicilio que no podrá cambiar sin conocimiento de la Justicia, en tanto durante los 10 meses deberá concurrir una vez por semana ante la dependencia policial más cercana al mismo.

El otro delincuente, identificado como Richard Daniel Vargas, fue condenado a 11 meses de prisión efectiva, como autor penalmente responsable de un delito de hurto especialmente agravado, en grado de tentativa.

La jornada del viernes 13 en tanto, la Justicia condenó a 7 meses de libertad vigilada a otro sujeto de 37 años, detenido cuando estaba a punto de concretar un robo en una propiedad de Ocean Park y Ruta Interbalnearia.

El hecho se producía en horas de la mañana, y la rápida llegada de la Policía al lugar indicado a través de una llamada telefónica, permitió detener al delincuente cuando salía del lugar con dos mochilas cargadas con distintos efectos.

Mientras el individuo fue reducido, una inspección ocular realizada por los efectivos, permitió comprobar que había ingresado a la finca tras provocar daños en un ventanal. Finalmente compareció ante la Justicia con el resultado indicado.

Fue imputado por un delito de hurto especialmente agravado por la penetración domiciliaria, en grado de tentativa. Durante los 7 meses de pena, deberá concurrir una vez por semana a la dependencia policial más próxima a su casa.

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