Los dos sujetos enviados a la cárcel, tienen 22 y 29 años y son poseedores de innumerables antecedentes; uno de ellos por la autoría de todo tipo de robos a fincas particulares y comercios de los más diversos rubros. Ambos cayeron en manos de la Policía tras robar una casa de repuestos del barrio Sarubbi de Maldonado.

Se trata de José Alexander Silva Arteta, de 22 años, y de Robert Erik Núñez Santos de 29, quienes por una rápida respuesta de personal de la URPM del Distrito 2 de la Policía, fueron intervenidos a pocas cuadras del comercio ubicado en avenida Aiguá y calle Belén, barrio Sarubbi de Maldonado.

En dependencias policiales se continuó trabajando, ya que entre otras pruebas de su responsabilidad en otros hurtos, existían registros de cámaras de video vigilancia. Finalmente fueron llevados ante el Juez Penal de 4° Turno que los condenó a 24 y 20 meses de prisión, respectivamente.

José Alexander Silva Arteta, fue encontrado responsable de cuatro delitos de hurto agravado, y de dos delitos de hurto en régimen de reiteración. Robert Erik Núñez Santos, fue condenado como autor de cuatro delitos de hurto agravados, en régimen de reiteración real.

A Silva Arteta y a Núñez Santos, se les probó el robo a una pizzería de avenida Lavalleja ocurrido el sábado 22 de febrero; el sábado 7 de marzo en una panadería y confitería del barrio La Loma; el jueves 12 del mismo mes, robaron una carnicería ubicada en avenida de los Gauchos.

El domingo 29 de marzo, fueron los autores de un robo en un pub ubicado en la esquina de avenida Joaquín de Viana y calle 25 de Mayo; el miércoles 8 de abril robaron en una fábrica de pastas de avenida Joaquín de Viana, y finalmente, el mismo día la casa de repuestos de barrio Sarubbi.

Es tremendo

A pesar de su corta edad, José Alexander Silva Arteta ya cuenta con una infinidad de antecedentes penales por la autoría de robos a fincas particulares y comercios de distintos rubros. Su última remisión a la cárcel databa del 9 de junio del año pasado, cuando fue imputado por tentativa de hurto.

Fue condenado a ocho meses de prisión efectiva, por lo que, hace apenas dos meses había recuperado la libertad. Esa vez fue tras las rejas por el robo a una finca de calle Santa Teresa, en el centro de la capital departamental, ocurrido el jueves 30 de mayo.

Tras romper la puerta principal de la propiedad, se llevó $ 10.000 en efectivo, un taladro y un cuchillo entre otros artículos. El joven y conocido ladrón dejó varias huellas en distintos espacios de la casa que llevaron a Policía Científica a identificarlo rápidamente.

Anteriormente, en el mes de mayo de 2018, había sido remitido a la cárcel durante 4 meses como autor de una tentativa de hurto. La Policía lo atrapó saliendo de una bicicletería del barrio Jardín los Treinta y Tres, de la que había robado $ 600; había roto el tejido y el vidrio de una ventana.

A todo esto, en abril de 2017, de una veterinaria de avenida De los Gauchos y calle Celedonio Rojas, en barrio Odizzio, mediante la rotura de una reja y el vidrio de una ventana, junto a otros dos sujetos robó $ 200 y un exótico loro amazónico. También esa vez terminó en prisión.