El imputado ha ingresado y salido sostenidamente de la cárcel por hurtos cometidos en distintas zonas del principal balneario. Esta vez robó una bicicleta del garaje de un edificio y terminó condenado a 6 meses de prisión.

El viernes 30 de abril en horas de la tarde, se presentó una denuncia ante la seccional policial 10ª de Punta del Este, por el robo de una bicicleta que se encontraba en el fondo de un garaje de un edificio de calle 27 (Los Muergos), en pleno centro de la península.

Investigadores de la Zona Operacional 1 que se hicieron cargo del caso, analizaron videos y fotografías obtenidas en el momento del robo, logrando identificar sin margen de error al autor, un joven y conocido ladrón poseedor de otros 6 antecedentes: Luis Carlos Galli Costa.

Tras las actuaciones de rigor, fue conducido ante la Jueza Penal de 11° Turno de Maldonado. Galli Costa, de 21 años, fue condenado a 6 meses de prisión efectiva, imputado como autor penalmente responsable de un delito de hurto.

Entra y sale

El domingo 19 de julio del año pasado, en horas de la mañana, la Policía concurrió al barrio Aidy Grill de Punta del Este, desde donde se había reportado la presencia de un sospechoso desplazándose en una bicicleta por calle Rosa de los Vientos, a pocas cuadras de la rambla Lorenzo Batlle Pacheco.

La dotación policial enviada a la zona comenzó una recorrida, cuando en determinado momento observó la bicicleta y a un sujeto retirando a través de una ventana de una finca, una bordeadora; cuando los policías intervinieron, encontraron otros efectos prontos para ser llevados.

El detenido era Luis Carlos Galli Costa, quien tras las actuaciones correspondientes compareció ante la Justicia, donde terminó siendo condenado a 5 meses de prisión efectiva como autor de un delito de violación de domicilio, con un delito de hurto en grado de tentativa.

Antes, el 13 de septiembre de 2019, había sido enviado a la cárcel por el término de 9 meses, cuando hacía poco más de un mes que había recuperado la libertad. Aquella vez, le imputaron la autoría de un delito de receptación, después de ser detenido mientras era buscado por dos robos.

Todo había comenzado una semana antes cuando un hombre se presentó en dependencias policiales a denunciar el robo de una valija de herramientas, un taladro y una motosierra, todo lo que se encontraba en el galpón de una finca de avenida Pedragosa Sierra, en Punta del Este.

Mediante la investigación realizada y el análisis de registros de distintas cámaras de video vigilancia, se pudo identificar al posible autor, quien a esa altura ya se había relacionado también con el robo de una moto, ocurrido semanas atrás en calle 28 (Los Meros) de Punta del Este.

El viernes 13 de septiembre, en momentos que funcionarios policiales realizaban un operativo de control, en un baldío de avenida Francisco Salazar identificaron a un sujeto que resultó ser Galli Costa, quien quedó detenido y a disposición Fiscal, compareciendo luego ante la Justicia.

A su vez, ese mismo año, concretamente el 10 de febrero, la Justicia dictó sentencia en proceso abreviado, condenando a Galli Costa a 5 meses de prisión como autor de un delito de hurto agravado en grado de tentativa, lo que quiere decir que gozaba de libertad desde hacía solo dos meses.

El sábado 9 de febrero de 2019, un llamado al servicio de emergencias 911 puso en conocimiento de la Policía, que de una residencia de avenida San Pablo, en Punta del Este, había salido minutos antes un desconocido llevándose una serie de objetos, presumiblemente robados.

En minutos estuvo en el lugar un móvil policial, cuya dotación interceptó en proximidades de la dirección aportada, a quien resultó ser Luis Carlos Galli Costa, llevando consigo una hidro lavadora, una aspiradora, una plancha, una alfombra y hasta varias toallas, entre otros efectos.

Antes, el 23 de agosto de 2018 había sido condenado como autor de un delito de hurto en grado de tentativa, y el 24 de diciembre de 2017 por idéntico delito; apenas cumplió la mayoría de edad, el 13 de octubre de ese año, fue condenado sin prisión por primera vez, por un hurto agravado.