Fue detenida en Montevideo e imputada como coautora de las maniobras, por lo que se sigue trabajando en procura de dar con un hombre que es la pieza principal en el caso.

La Policía de Maldonado pudo aclarar cuatro estafas, a partir de una denuncia recibida el viernes 25 de noviembre por parte de una mujer que, admitió haber entablado una relación amorosa con un hombre extranjero al que solamente conoció a través de una red social.

Aunque no se reveló con que excusa, el sujeto logró que la víctima le depositara una suma de dinero en dólares en una cuenta bancaria, tras lo cual perdió todo tipo de contacto y decidió radicar la denuncia. El trabajo policial desembocó en una joven dominicana radicada en Montevideo.

Se trataba de la titular de la cuenta que recibió el dinero, identificada como A.M.L., de 28 años, quien fue localizada y trasladada a Maldonado, donde se supo que había otras víctimas de maniobras similares, y denuncias de 11 y 12 de mayo de este año, y otra del 17 de octubre.

Cumplidas otras actuaciones dispuestas por la fiscalía de 3er. turno de Maldonado, A.M.L. fue conducida al juzgado penal de 11° turno donde fue condenada como coautora de cuatro delitos de estafa, en régimen de reiteración real, y penada con 18 meses de libertad a prueba.

Mientras la investigación continúa en procura de dar con el autor de las maniobras delictivas, A.M.L. tendrá que cumplir arresto domiciliario nocturno, presentarse una vez por semana ante la Policía, y durante 10 meses realizar tareas comunitarias con una frecuencia de dos horas semanales.

Empleado infiel

Desde el mes de abril de este año, personal de la seccional policial 1ª de Maldonado se encontraba trabajando en torno a una denuncia por posible estafa en perjuicio de un comercio de la ciudad. El sospechado de realizar maniobras fraudulentas era un empleado.

Algunas de las burdas maniobras consistían en la entrega de mercadería a clientes, pero sin declarar el dinero cobrado. Días atrás el denunciado, identificado con las iniciales P.M.G.V., de 43 años, por orden judicial fue citado a declarar terminando condenado por un delito continuado de apropiación indebida.

La pena impuesta es de 15 meses de libertad a prueba, incluyendo el arresto domiciliario nocturno de 22.00 a 6.00 horas, presentación ante la Policía una vez a la semana y la obligación de prestar servicios comunitarios dos veces por semana con una carga de 2 horas cada vez.