El sujeto, que en todos los casos actuó solo, dio sus golpes en zonas residenciales de Punta del Este y La Juanita, en algunos casos con moradores. Se hizo de miles de dólares y pesos en efectivo, así como de relojes de afamadas marcas y algunas joyas.
En el entorno de la hora 23.00 del viernes 13 de enero, desde un chalet ubicado en avenidas Miguel Ángel y Elías Regules, en la zona de Rincón del Indio (Punta del Este), se llamó a la Policía ya que acababa de cometerse un importante hurto con moradores.
La víctima, ciudadano argentino de 74 años, dijo a la dotación del móvil de la URPM de Zona 2 que fue el primero en arribar al lugar, que estaba en su dormitorio del segundo piso cuando decidió bajar a la planta baja por unos minutos, y al retornar, se percató de que la ventana del baño estaba abierta.
Había sentido ruidos en el patio y comprobó que en pocos minutos, alguien había ingresado a la habitación llevándose un reloj pulsera de hombre marca Armani, cuyo costo ronda los US$ 4.000, US$ 7.200 en efectivo que se encontraban en una cartera, así como una cadena de plata con un dije.
En la finca hay cámaras de seguridad y sistema que alarma que no estaba activado. Policía científica recogió muestras de huellas dactilares que permitieron vincular a Diego Adrián García Rocha, de 35 años, por lo que se enteró a la fiscal Jessica Pereira que obtuvo la orden de detención.
Investigadores de Zona 2, junto a sus pares de Zona 4 que trabajaban en otros hurtos que vinculaban a Diego Adrián García, con orden de allanamiento llegaron a la casa donde estaba viviendo, en el barrio Los Olivos de Maldonado, donde lograron su detención así como la incautación de varias pruebas.
Con su detención se aclaró: un hurto con moradores del 6 de enero en una finca de calles Javier de Viana y Leña Seca, en el barrio Lido de Punta del Este, de la que hurtó US$ 700, $ 46.000, tarjetas de crédito y débito. El mismo día hurtó en otra finca de calles Atlántida y Montecarlo, en el barrio San Rafael.
También otro cometido en balneario La Juanita, en una finca con moradores el sábado 14 de enero, de la que se llevó un reloj marca Rolex y 3 anillos de oro, todo lo que fue avaluado en US$ 45.000. El mismo día, en una casa lindera intentó robar pero, aparentemente, no logró ingresar.
Completadas las actuaciones y realizada la audiencia en la sede penal de 11° turno, Diego Adrián García Rocha fue condenado como autor de 3 delitos de hurto especialmente agravados, y 2 delitos de violación de domicilio agravados, todos en régimen de reiteración real entre sí, y penado con 3 años penitenciaría.
Vasta experiencia
El último antecedente de Diego Adrián García Rocha es del 14 de septiembre del año 2020, cuando fuera condenado por “un delito contra la propiedad mueble o inmueble”, y penado con una serie de medidas sustitutivas a la prisión, a pesar de la carga de antecedentes que poseía.
Anteriormente, el 18 de junio de 2019, la jueza penal de 11° turno de entonces, lo condenó por cuatro delitos de hurto especialmente agravados y tres delitos de hurto, con un delito de violación de domicilio especialmente agravado, a la pena de dos años y cuatro meses de prisión.
Aquel año, cometió 7 hurtos en solamente 50 días: el robo de una bicicleta el 27 de abril, el hurto de un hotel y una casa de familia a fines de mayo, y otros cuatro robos, entre el 7 y el 17 de junio, a dos residencias, un edificio y un hotel, figuran entre aquellos delitos de su historial.
Efectivos de Investigaciones de Zona 2 analizaron registros de cámaras de seguridad y con las pruebas obtenidas en los lugares de los hurtos identificaron a Diego Adrián García Rocha como el autor, logrando detenerlo en calles del asentamiento Kennedy de Punta del Este.
A su vez, a mediados de octubre de 2017 en el juzgado penal de 10° turno, había sido procesado con prisión como autor de dos delitos de hurto, uno especialmente agravado. El segundo de los robos fue en un edificio del barrio Pine Beach de Punta del Este, al que ingresó escalando un muro.
Diego Adrián García Rocha fue plenamente identificado como el autor, pero cuando la Policía llegó a su casa se dio a la fuga. Posteriormente fue visto por un funcionario policial mientras viajaba en un ómnibus desde la ciudad de Treinta y Tres. La unidad fue interceptada y el ladrón detenido.