Un alto porcentaje de quienes cometen delitos en Maldonado, tienen menos 30 años, y llamativamente poseen una enorme cantidad de antecedentes de todo tipo. En varios casos, apenas salen de prisión vuelven a delinquir y nuevamente terminan tras las rejas. Los siguientes son 3 de estos casos.

En horas de la mañana del sábado 8 de abril, un hombre llamó a la Policía, para denunciar que al llegar a su domicilio en el barrio La Fortuna de Maldonado, vio a un individuo saliendo de la propiedad, llevándose una soldadora y un taladro, aunque al verlo huyó y dejó todo abandonado.

Agregó que el sujeto se fue en una bicicleta y que había ingresado a un monte de la zona, por lo cual los efectivos que acudieron al llamado implementaron un operativo, localizando en el cercano barrio Villa Delia a un conocido ladrón: Víctor Manuel Díaz Sosa, de 29 años.

Detenido y trasladado a dependencias policiales, se enteró a la Fiscalía de 2° turno, fue indagado y finalmente conducido a la sede penal de 4° turno, donde terminó condenado como autor de un delito de hurto especialmente agravado, en grado de tentativa, y penado con 7 meses de prisión.

Bastante conocido

Víctor Manuel Díaz Sosa registra su última remisión a la cárcel del 30 de marzo de 2021, luego que la madrugada del viernes 26, efectivos policiales que patrullaban calles del barrio Los Aromos, en Maldonado, lo interceptaron tripulando una moto y llevando encima del tanque un martillo percutor.

Aunque le incautaron el martillo y lo dejaron continuar (no existía denuncia de robo), los policías continuaron su tarea por la zona hasta que observaron frente a una casa, un coche con las puertas abiertas y presentando un gran desorden en el interior, donde había varias herramientas.

Ubicado el dueño del coche, resultó ser el dueño del martillo percutor incautado. Más tarde, fue requerida la presencia policial desde el mismo lugar, ya que un delincuente fue sorprendido mientras intentaba robar distintos efectos. Huyó pero dejó abandonada la moto y un teléfono.

A esa altura quedaba claro que Díaz Sosa había sido el autor del hurto de la mencionada herramienta y había vuelto al mismo lugar para continuar robando. Librada su requisitoria por parte de la Fiscalía actuante, lo detuvieron mientras caminaba por calles del barrio Cerro Pelado.

Llevado ante la Jueza Penal de 11º Turno, fue condenado a 14 meses de prisión efectiva, como autor de un delito continuado de hurto especialmente agravado. Ya poseedor de diversos antecedentes por robos de todo tipo, estaba en libertad desde mediados del año anterior.

Su anterior antecedentes databa del 18 de abril 2019, cuando la jueza penal de 11º turno lo condenó a 14 meses de prisión como autor de un robo perpetrado en junio de 2018 del galpón de una finca del barrio Pinares de Maldonado, donde hallaron huellas que terminaron incriminándolo.

Díaz Sosa estaba a pocos días de recuperar la libertad porque estaba en la cárcel de Las Rosas desde el 21 junio del año 2018, cuando fue encontrado responsable de otros dos robos. El 17 de abril de 2019, llegaron resultados de la muestras enviadas a Montevideo y fue nuevamente imputado.

Lo trasladaron ante la Justicia desde el centro de reclusión y fue condenado nuevamente a otros 14 meses de prisión. En la finca de Pinares, había roto la puerta de un galpón y se marchó con una bordeadora. El trabajo de Policía Científica resultó clave para aclarar el hecho.

En tanto, el jueves 21 de junio del año 2018, el juez penal de 4° turno, en proceso abreviado había dictado sentencia definitiva para este sujeto, como autor de dos delitos de hurto, uno de ellos agravado y en grado de tentativa, condenándolo a 10 meses de prisión.

En horas de la madrugada del día anterior, ingresó al predio de la distribuidora de helados Crufi, ubicada en calles Sicilia y Córcega, en barrio Los Aromos, mediante escalamiento de los muros, y tras revisar los camiones de la empresa y provocar daños en uno, robó 28 cassatas heladas.

La Policía fue inmediatamente alertada del hecho por lo que rápidamente se inició la búsqueda del autor del particular robo, quien fue ubicado por un móvil en el cercano barrio Cerro Pelado, a bordo de una moto junto a otro individuo y llevando un bulto muy grande envuelto en una frazada.

Cuando se les pidió que detuvieran la marcha, emprendieron la fuga por distintas calles, hasta que en determinado momento Díaz Sosa arrojó a la calle el bulto que no era otra cosa que el cargamento de helados que poco antes había robado. Finalmente, ambos fueron detenidos.

Víctor Manuel Díaz Sosa, fue imputado por el hurto de los helados y también por el de la moto que había sido denunciada como robada unas horas antes, y en la que se desplazaba junto al otro sujeto. Precisamente el otro individuo quedó en libertad, aunque en calidad de emplazado.

Díaz Sosa, anteriormente había sido procesado con prisión en marzo de 2016 y condenado el 12 de agosto del mismo año, como autor de tres delitos de hurto en reiteración real, tras haber robado en pocos días un almacén, una papelería y una farmacia en distintas zonas de Maldonado.

JOVEN LADRONA ESTUVO POCO EL LIBERTAD

En horas de la mañana del lunes 6 de marzo, en la subcomisaría de Cerro Pelado, Maldonado, fue recepcionada una denuncia por hurto cometido en una casa de la zona. La denunciante dijo que en determinado momento llegó a su casa una joven mujer que le solicitó un vaso de agua.

Ella accedió, pero sorpresivamente la joven tomó su teléfono celular y huyó del lugar. Con los datos aportados, la Policía pudo identificar sin margen de error a Sofía Agustina Clavijo Correa, de 26 años -quien recientemente había salido de la cárcel-, como responsable del hurto del aparato.

Poco después, la joven delincuente fue localizada por la Policía y puesta a disposición de la fiscalía de 1er. turno, hasta comparecer en la sede penal de 4° turno de Maldonado, donde se dispuso su condena como autora de un delito de hurto, y fue penada con 5 meses de prisión.

Es tremenda

Su último antecedente es del 1° de julio de 2021 cuando en la sede penal de 4° turno, fuera condenada a 20 meses de prisión, imputada como autora de 1 delito de hurto especialmente agravado, con 9 delitos de hurto (3 en concurrencia fuera de la reiteración), con 3 delitos de violación de domicilio agravados.

Entre febrero y marzo de aquel año, ya había pasado por los estrados judiciales, y a pesar de la cantidad de antecedentes que ya poseía, estaba en libertad y terminó cometiendo una seguidilla de robos, llamativamente, todos durante el mes de junio y en solamente 10 días.

El raid delictivo de Sofía Agustina, se inició el 19 del mes de junio, cuando robó una moto del interior de un galpón en el barrio Cerro Pelado; el sábado 24, hurtó golosinas de un kiosco ubicado sobre avenida Lussich, y dos días después se llevó distintos productos de un almacén.

El mismo día robó otra moto, debajo de cuyo asiento había una billetera con $ 700 y la propiedad de la misma; el martes 27, de una pollería del barrio San Gabriel se llevó una serie de productos, y un encendedor; pero además, de otro almacén robó una botella de whisky, tabaco, cigarrillos y dos perfumes.

En su imparable carrera delictiva, el miércoles 28, de un autoservicio de la estación de servicios del barrio Cerro Pelado, se llevó sin pagar distintos alimentos, golosinas y cigarrillos. Al día siguiente, en horas de la mañana, Sofía Agustina robó otra moto del predio de una casa.

Allí comenzó el final de este increíble proceso porque la Policía poco más tarde vio la moto y pudo identificar a la joven que la conducía, quien en determinado momento la abandonó y se dio a la fuga. Pero lejos de tranquilizarse, el viernes 30 volvió a robar una moto en el barrio Cerro Pelado.

Policías que se movilizaban por distintas zonas con datos concretos sobre quién podía haber cometido el hurto, detectaron en el mismo barrio fernandino a Sofía Agustina Clavijo Correa conduciendo la moto. Al verse perseguida, también la abandonó y emprendió una alocada carrera.

Ingresó a un predio particular y se fue desplazando por los techos de las casas, hasta que fue apresada en la suya. Trasladada inmediatamente a dependencias policiales, se completaron las distintas actuaciones hasta que compareció ante la Justicia con el resultado antes señalado.

Sofía Agustina Clavijo, ese mismo año 2021 ya había pasado dos veces ante la Justicia, pero, y a pesar de la gran cantidad de antecedentes que ya poseía, no fue a prisión. El 28 de febrero le imputaron un delito de hurto agravado, y el 21 de marzo la autoría de un delito de receptación agravado.

En horas de la madrugada del sábado 27 de febrero, robó en un comercio de calle Cuchilla de la India Muerta, en el barrio Cerro Pelado, al que ingresó tras el forzamiento de un portón lateral; como en la mayoría de los casos, se llevó comestibles, bebidas y otros efectos.

Por ese caso, le impusieron 60 días de arresto domiciliario nocturno, de 22.00 a 6.00 horas del día siguiente. A mediados de marzo, le aplicaron 60 días de arresto total, imputada por un delito de receptación, tras poner a la venta en una cuenta de la red social Facebook, efectos robados.

El 19 de aquel mes un hombre había denunciado el hurto de dos reeles del interior de su propiedad. Cuando se allanó la casa de esta muchacha, los implementos de pesca que estaban a la venta, se encontraban allí. La chica negó haber sido la responsable del robo.

Anteriormente, el 11 de octubre de 2016, había ido a la cárcel -junto a su novio-, por 4 delitos de hurto, especialmente agravados por la pluriparticipacion y por haberse efectuado sobre cosas expuestas al público por necesidad  y/o costumbre, uno de ellos en grado de tentativa.

Su detención se produjo tras una intensa persecución de varias unidades policiales, que culminó con la interceptación de un Chevrolet Chevette en la Ruta Perimetral, a la altura de Paso Marrero, y la detención de la pareja y un tercer delincuente que fue herido de bala por la Policía.

Precisamente, desde una unidad policial se efectuaron disparos contra el coche que había sido robado en barrio Hipódromo, resultando herido uno de los delincuentes que debió ser internado en el hospital de Maldonado; los policías involucrados fueron detenidos y luego imputados.

Aquel mismo año (2016), el 22 de febrero, Sofía Agustina Clavijo y su novio habían sido remitidos a la cárcel por un robo cometido en una finca del barrio La Fortuna de Maldonado. A su vez, unos 8 meses antes fueron enviados a prisión por varios delitos, pero ya gozaban de plena libertad.

De la finca de La Fortuna se llevaron un televisor plasma de 24 pulgadas con control remoto, 3 botellas de whisky, 1 matera de cuero y 1 par de calzado deportivo. El juez penal de 10º turno, dispuso la remisión a la cárcel de ambos, como autores de dos delitos de hurto especialmente agravado.

Pero a mediados de junio de 2015, esta pareja de delincuentes ya había sido enviada a la cárcel de Las Rosas. El sábado 27 de aquel mes, un efectivo de Investigaciones persiguió y detuvo al individuo, quien hacía varios días estaba requerido por varias dependencias.

Luego fue detenida Sofía Agustina Clavijo. Durante los interrogatorios, surgieron elementos que confirmaron la participación de la pareja en los robos de dos motos, y en un arrebato en perjuicio de una mujer de 43 años, ocurrido en pleno centro de la ciudad de Maldonado.

Llevados ante el juez penal de 10° turno, el hombre fue remitido a la cárcel por 3 delitos de hurto agravados en reiteración real, con un delito de lesiones personales; Sofía Agustina, también fue remitida a la cárcel como autora responsable de 3 delitos de hurto en reiteración real.

OTRO QUE VIENE CON UNA PESADA CARGA

El sábado 11 de marzo, se detectó la presencia de dos desconocidos saliendo de una casa ubicada en calle Agapito Parabera, Maldonado, cargando un televisor. Efectivos del grupo PADO que fueron los primeros en llegar al lugar, detuvieron a un sujeto poseedor de un frondoso prontuario.

Se trataba de Jack Donnoban Herrera Umpiérrez, de 26 años, a quien le incautaron el televisor, aunque el otro ladrón que lo acompañaba logró escapar. El caso fue sustanciado en la Fiscalía de 3er. turno, donde se instruyeron los pasos a seguir se dispuso la comparecencia del ladrón ante la Justicia.

Cumplida la audiencia en el juzgado penal de 4° turno, se dispuso la condena de Jack Donnoban Herrera Umpiérrez, como autor penalmente responsable de un delito de hurto especialmente agravado, en grado de tentativa, por el que fue penado con 7 meses de prisión efectiva.

Otro bien cargado

El último antecedente de Jack Donnoban Herrera Umpiérrez, es del 17 de diciembre de 2021, cuando le imputaran un delito de negociación de sustancias estupefacientes. Junto a otro individuo fue detenido por la Policía tras ser denunciado por realizar disparos en la vía pública.

En horas de la tarde del día anterior, personal policial se desplazó hacia calles Bambú y los Caciques en el barrio Maldonado Nuevo, ya que una llamada al servicio de emergencias 911 daba cuenta de la presencia de varios sujetos efectuando disparos en la vía pública.

En el lugar, los efectivos detuvieron a un joven de 24 años y poseedor de gran cantidad de antecedentes, quien intentó darse a la fuga al tiempo de descartarse de una bolsa de nylon que contenía 23 lágrimas de clorhidrato de cocaína y otras 3 dosis de marihuana.

Junto a él fue detenido Jack Donnoban Herrera Umpiérrez, a quien los efectivos le incautaron la suma de $ 650 en billetes de baja denominación. Mientras otros individuos que estaban con ellos lograron huir de la Policía, los detenidos fueron trasladados para ser indagados.

Tras la intervención de la Brigada Departamental Antidrogas, por orden de la Fiscalía de 4° turno, comparecieron en el juzgado penal de 11° turno. Herrera Umpiérrez, fue formalizado por la presunta comisión de un delito de negociación de sustancias estupefacientes.

Antes, el 3 de agosto de 2019, lo habían remitido a la cárcel por 2 años y 8 meses imputado por estos delitos: porte y tenencia de arma de fuego en lugares públicos; porte de arma de arma por reincidente; tráfico interno de armas de fuego y municiones; y tenencia de estupefacientes.

Cuatro armas cortas de fuego, decenas de proyectiles de distintos calibres además de casi un cuarto kilo de droga, se encontraban en poder de este sujeto que fue detenido por la Policía en el barrio San Antonio de la ciudad de Maldonado, luego de intentar escapar de la Policía junto a un amigo.

El procedimiento se realizó dos días antes en la madrugada, luego que una patrulla del PADO observara dos motos con un ocupante cada una en situación por demás sospechosa en calles del barrio San Antonio de la capital departamental, por lo cual se solicitó apoyo a otras unidades.

En minutos llegó personal de Investigaciones de Zona 2, aunque cuando iban a intervenir a los sospechosos, estos abandonaron los birrodados y emprendieron la huida por distintos predios de fincas sobre calle Josefa Luis, en dirección a Alberto Caracara, y cargando una mochila cada uno.

Tras un muro dejaron las mochilas y se perdieron de vista en distintos patios aunque el fuerte despliegue policial logró detenerlos poco después. Se trataba de Jack Donnoban Herrera Umpiérrez, y de otro joven que luego de ser identificado  fue puesto en libertad.

En las mochilas, se encontró una pistola calibre 32 y una Bersa 22m.m.; un revolver Colt calibre 38 y otro Smith & Wesson calibre 32. También 91 cartuchos calibre 22; 4 cartuchos calibre 38, 1 cartucho calibre 32, 1 cartucho calibre 357, 6 cartuchos calibre 16, 1 cartucho calibre 22, y 1 cargador de pistola.

Dentro de las mochilas había además teléfonos celulares, $ 14.228, llaves y un reloj pulsera, así como dos pequeñas bolsas conteniendo 201 gramos de sustancia blanca que, la Policía no especificó si se trataba de cocaína o de pasta base de la misma droga; las dos motos también fueron incautadas.

Ya a esa altura, el 18 de abril de 2018 había sido penado por la autoría de un delito de hurto especialmente agravado, y penado con medidas sustitutivas a la prisión. A comienzos de mayo de 2016, con solo 19 años fue a la cárcel por un delito de hurto especialmente agravado por la pluriparticipación.

Fue responsable de un robo en un comercio ubicado en el barrio Odizzio de Maldonado, ubicado en avenida De los Gauchos y calle Pablo Zufriategui. El damnificado indicó que el o los ladrones se habían llevado varios cartones de cigarros, botellas de bebidas alcohólicas y golosinas.