En el mismo lugar, en el barrio Sarubbi de Maldonado, este año ya había habido varios procedimientos policiales por el mismo delito. La responsable de la boca era una mujer de 45 años que estará 2 años en la cárcel.

 

El miércoles 26 de junio en horas de la tarde, cuando efectivos del grupo PADO de la Zona Operacional 2 se desplazaban a la altura de calles Arturo Santana y 12 de Octubre, en el barrio Sarubbi de la ciudad de Maldonado, decidieron seguir los pasos de un hombre que al verlos emprendió la fuga e ingresó a una vivienda.

En la casa, ubicada sobre calle 12 de Octubre, no se le permitió a los policías ingresar, aunque minutos después se vio al individuo intentar escapar de la zona saltando por los techos de las fincas aledañas, a las que sí pudo ingresar la policía. En uno de los techos, se encontró una balanza de precisión, dinero y clorhidrato de cocaína.

Fue a partir de allí que se enteró a la Brigada Departamental Antidrogas (BDA) que continuó a cargo del procedimiento, realizando varias actuaciones en la órbita de la fiscalía penal de 2° turno, confirmándose días después que en una casa de esa zona funcionaba una boca de comercialización de estupefacientes.

El jueves 11 de julio, personal de la BDA apoyado por efectivos de otras reparticiones y munidos de orden de allanamiento, llegaron a una finca ubicada sobre calle Arturo Santana casi 12 de Octubre, donde sorprendieron a 3 personas que fueron detenidas: Luis Eduardo Giménez Merino, de 30 años, la mujer L.G.G., de 45, y É.P.L., de 23.

Asimismo, en la propiedad se incautaron $ 23.520, clorhidrato de cocaína en piedra (no se precisó la cantidad), una balanza de precisión, dos cortes de tipo carcelario y 3 teléfonos celulares. Los tres detenidos -todos poseedores de antecedentes-, fueron conducidos para ser indagados y luego comparecieron ante la justicia.

Cumplida la audiencia, L.G.G. fue condenada como autora de un delito continuado de suministro de sustancias estupefacientes, y penada con 2 años de penitenciaría, mientras que Luis Eduardo Giménez Merino, fue imputado como cómplice del mismo delito y penado con 8 meses de prisión. En tanto É.P.L. recuperó la libertad.

En esa misma propiedad, la policía ya había realizado diversos procedimientos vinculados a la negociación de estupefacientes en lo que va de este año, por lo cual en coordinación con la Intendencia de Maldonado, por disposición judicial se procedió a demoler parte de la vivienda y a clausurar otras, lo que se concretó el viernes 12 de julio.

Una larga experiencia

Luis Eduardo Giménez Merino, registra el último de sus varios antecedentes del domingo 1° de noviembre del año 2020 cuando fuera condenado como autor de un delito de hurto en grado de tentativa, y un delito de tenencia no para consumo de sustancias estupefacientes, siendo penado con 3 años de penitenciaría.

Fue intervenido por personal de Investigaciones del entonces Distrito 2 en el asentamiento Los Eucaliptos, tripulando una moto que al ser inspeccionada, tenía debajo del asiento 178 dosis de cocaína y $ 10.611 en efectivo, lo que confirmaba que iba a abastecer una boca o estaba vendiendo en la modalidad de “delivery”.

A esa altura, había sido condenado anteriormente el miércoles 22 de enero, luego de protagonizar un hecho sin explicación lógica en la calle Román Guerra de Maldonado, donde provocó daños en todo lo que encontró a su paso, hasta ser detenido por varios particulares. Lo penaron con 6 meses de prisión.

Distintos llamados a la Policía, daban cuenta que un desconocido -muy probablemente bajo los efectos de algún tipo de droga-, estaba provocando daños en todo lo que encontraba a su paso, incluyendo tanto vehículos particulares como elementos del ornato público ubicados sobre esa céntrica arteria de Maldonado.

Una dotación policial se movilizó rápidamente hacia Román Guerra, entre Florida e Ituzaingó, donde varios particulares ya habían logrado reducir al iracundo sujeto que resultó ser Luis Eduardo Giménez Merino. Los efectivos se hicieron cargo del individuo que fue trasladado a dependencias policiales.

Anteriormente, había sido enviado a la cárcel el 24 de marzo del año 2017, cuando en el marco de la “Operación Amanecer” varias personas fueron condenadas por delitos vinculados a las drogas. Giménez Merino cayó junto a otros dos individuos en el asentamiento Los Eucaliptos.

Esa vez (aún regía el anterior Código del Proceso Penal) fue imputado por la presunta comisión de un delito continuado de violación al Artículo 34 de la Ley Nº 14.294, que pena el suministro a título oneroso de sustancias estupefacientes, en reiteración real, con un delito de amenazas especialmente agravado.

La Policía lo intervino cuando se desplazaba en una moto llevando un morral con 57 dosis de pasta base, un envoltorio con marihuana, 3 cogollos de cannabis aún sin procesar y casi $ 1.000. En un allanamiento posterior fueron atrapadas otras dos personas. Su primer antecedente es del 23 de abril de 2016 cuando fue a prisión por receptación.

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