Se trata de un delincuente de 35 años que ya contaba con otros 12 antecedentes penales. Esta vez cometió una seguidilla de hurtos en Punta el Este, Piriápolis y Pueblo Obrero. La Justicia le aplicó una pena de 21 meses de prisión.

Como lo informara MaldonadoNoticias, pasada la hora 8.30 del martes 19 de agosto, policías de Zona 1, con base en Piriápolis, concurrieron a una finca de calle Magallanes, en Pueblo Obrero, donde en la madrugada habían ingresado al área del parrillero, hurtando una bicicleta, una garrafa de supergas y un juego de cuchillos.

También del interior de un vehículo de la casa se llevaron un par de lentes, según consignó el denunciante. Los investigadores comenzaron a trabajar en el caso hasta que sobre la hora 14.30 del miércoles 20 de agosto, policías de la URPM informaron que inspeccionando una casa abandonada de la zona, encontraron a un individuo pernoctando.

Aunque apenas vio acercarse a los efectivos intentó darse a la fuga, terminó detenido. Se trataba de Diego Martín Molfino González. A su vez, en la casa sita en calles Pablo Zufriategui y Buschental, se encontraron múltiples efectos, entre ellos los hurtados la madrugada anterior en la finca de Pueblo Obrero.

En el procedimiento trabajó personal de Investigaciones de las zonas operacionales 1 y 2, así como de la seccional 11ª de Piriápolis. El voluminoso botín encontrado en la casa donde se refugiaba, estaba compuesto por electrodomésticos, prendas de vestir, otra serie de objetos así como decenas de cajillas de cigarrillos.

Con el trabajo de Policía Científica, más tareas de análisis e investigación, y el estudio de registros de cámaras de video vigilancia del Centro de Comando Unificado, se pudo establecer que Molfino González -muy conocido delincuente-, había cometido nada menos que 7 hurtos en Piriápolis y en Punta del Este.

El domingo 20 de julio, hurtó una bicicleta y herramientas en una finca de Punta del Este; el domingo 3 de agosto, robó una segunda bicicleta de otra residencia de la zona de San Rafael, y en el mismo barrio del balneario cuatro días después se hizo de una moto, herramientas varias y una cafetera de otra propiedad.

Posteriormente se fue a la zona de Piriápolis, donde el domingo 17 de agosto hurtó otra bicicleta en una vivienda del balneario, y dos días después dinero cigarrillos, encendedores y alimentos de un comercio de la ciudad; finalmente, el miércoles 20 de este mes se llevó varias herramientas de una finca de Pueblo Obrero.

Enterada la Fiscalía de 5° turno se ordenó su conducción a esa sede. Tras ser indagado fue llevado al Juzgado Penal de 11° turno, donde terminó condenado. Diego Martín Molfino González, de 35 años, fue imputado como autor de 7 delitos de hurto agravados, 3 de ellos en grado de tentativa, siendo penado con 21 meses de prisión.

Superó la docena

Este delincuente ya contaba con 12 antecedentes penales por la autoría de hurtos de todo tipo en fincas particulares, comercios y automóviles, y había sido enviado a la cárcel por última vez en el mes de mayo del año 2023, por otra serie de robos cometidos en balneario El Tesoro y en la zona del barrio San Rafael de Punta del Este.

El viernes 19 de mayo de aquel año en horas de la noche, personal de la URPM de Zona 4 concurrió a una casa del balneario El Tesoro, donde los propietarios denunciaron que poco antes un hombre se dio a la fuga por los fondos de la vivienda, luego de, presuntamente, haber sustraído herramientas de un galpón.

Los efectivos policiales iniciaron recorridas por toda la zona con apoyo de personal de seccional 12ª de La Barra, logrando la detención de Diego Martín Molfino González, y la recuperación de los efectos hurtados. Una vez en dependencias policiales fue enterada la Fiscalía de 4° turno de Maldonado.

Pero en horas de la madrugada del sábado 20, Molfino González logró romper las rejas de la celda donde se encontraba alojado, dándose a la fuga, por lo que de inmediato se montó un vasto operativo de búsqueda que concluyó con su recaptura en el ex asentamiento del barrio Kennedy donde se había guarecido.

Tras ser indagado, el delincuente fue conducido al Juzgado Penal de 4° turno de Maldonado, donde se dispuso su formalización como presunto autor de un delito de auto evasión -pero curiosamente no por tentativa de hurto-, siendo enviado a cumplir 60 días de prisión preventiva. Posteriormente lo condenaron.

En aquel momento, este sujeto había sido enviado a la cárcel por última vez el sábado 14 de mayo del año 2022, tras haber sido encontrado responsable de un hurto cometido el sábado 23 de abril en una residencia de calle Los Claveles, en el barrio El Golf de Punta del Este, de la que se había llevado una bicicleta.

Registros de cámaras de video vigilancia permitieron identificarlo, tras lo cual la Justicia libró la orden de detención que, se concretó el viernes 13 de mayo cuando una patrulla lo encontró en calle Trinidad, en el barrio Marconi de la península. Fue imputado por violación de domicilio y hurto, y penado con 7 meses de prisión.

Anteriormente, el martes 7 de septiembre de 2021, Molfino González también había sido condenado a 7 meses de prisión por un delito de violación de domicilio agravado, en concurrencia fuera de la reiteración, con un delito de hurto, tras haber sido detenido entre El Jagüel y el ex asentamiento Kennedy.

El personal policial que lo intervino en avenida San Pablo y camino Aparicio Saravia, encontró entre sus pertenencias varios pares de lentes, un GPS, un reloj y otros objetos, cuya procedencia no pudo justificar. Ante esto, si bien lo dejaron continuar, le incautaron todo lo que llevaba consigo.

Más tarde, fue localizado el propietario de todos los efectos, quién radicó denuncia escrita, ya que todo lo incautado se lo habían robado del interior de su vehículo mientras se encontraba estacionado dentro de su propiedad en el barrio San Rafael, por lo cual la Justicia dispuso la requisitoria de Molfino.

Del año 2021 hacia atrás, este incansable ladrón ya había cometido otra serie de ilícitos, como violación de domicilios, hurtos de distintas características (en casas y vehículos) y receptación. Su zona de preferencia eran barrios de Punta del Este aunque también había delinquido en zonas de la capital departamental.