Se trata de un conocido delincuente de Piriápolis, de 29 años, responsable a lo largo de los años de una importante cantidad de hurtos, tanto en comercios como en fincas particulares de esa ciudad.
El martes 30 de septiembre, fue cometido un hurto en un kiosco ubicado en calle 18 de Julio, al Este del centro de la ciudad de Piriápolis. Fue denunciado por su propietario a través del teléfono de emergencias 9-1-1. En primera instancia concurrió al lugar un móvil de la URPM de la Zona Operacional 1.
En el kiosco, habían roto una ventana y provocado un gran desorden en el interior. El damnificado, luego se presentó a radicar la denuncia y confirmar que le habían llevado: fundas de cervezas en lata y de bebidas gaseosas, cajas de cigarrillos, comestibles varios, petacas de bebidas alcohólicas y una balanza, entre otros productos.
Policía Científica realizó el relevamiento del lugar y tomó algunas muestras, en tanto investigadores de Zona 1 iniciaron una serie de averiguaciones que condujeron al responsable del hurto, un conocido delincuente de la ciudad identificado como Carlos Facundo Enríquez González, de 29 años.
Enterada la Fiscalía de 5° turno, dispuso continuar con la investigación al tiempo de tramitar varias órdenes de allanamiento. El miércoles 8 de octubre, fueron allanadas dos viviendas en el balneario de los cerros, una ubicada sobre calle General Urquiza entre Defensa y Ayacucho, donde no hubo resultados positivos.
En la otra, sita en calles Las Piedras y Rondeau, en otro extremo de la ciudad, se logró la detención de Carlos Enríquez González, quien horas más tarde fue trasladado a Fiscalía, en Maldonado. Finalmente compareció en el Juzgado Penal de 4° turno donde fue condenado como autor de un delito de hurto, siendo penado con 5 meses de prisión.
Bien conocido
Este sujeto es poseedor de varios antecedentes penales, por el último de los cuales fue sometido a la Justicia en agosto del año pasado. Precisamente la madrugada del jueves 1° de aquel mes, fue denunciado un hurto cometido en un comercio ubicado sobre calle Misiones, en la ciudad de Piriápolis.
Uno o más desconocidos habían provocado daños en la puerta principal y del interior se llevaron el dinero que estaba en la caja, todo lo que quedó filmado. Pero antes que fuera denunciado este hecho, personal del grupo PADO de Zona 1 había identificado a Carlos Facundo Enríquez González.
Ya era conocido por ilícitos cometidos en la zona y luego se supo que vestía la misma ropa con la que se lo veía en los registros de las cámaras. Pero como no había sido intervenido, se informó a la Fiscalía de 5° turno que impartió directivas y solicitó la orden de detención del sujeto que, se concretó la madrugada del jueves 15 de agosto.
Cuando personal del grupo PADO lo ubicó en calle Rondeau, llevaba una bolsa con 64 gramos de marihuana. Detenido, trasladado a dependencias policiales, e indagado, posteriormente fue conducido a la sede Penal de 11° turno, donde resultó condenado como autor de un delito de hurto, y penado con 4 meses de prisión.
Enríquez González ya registraba varios antecedentes, el último de los cuales era del viernes 15 de septiembre de 2023, cuando lo enviaran a la cárcel como autor de un delito de hurto agravado, mientras que, anteriormente, por el mismo delito pero especialmente agravado, había ido tras las rejas el 24 de noviembre de 2020.
La Justicia lo penó con 15 meses de prisión, tras haber sido encontrado responsable de un hurto cometido el 3 de aquel mismo mes en una finca de calle Capri, en la ciudad de Piriápolis. La investigación llevada adelante por personal de Zona 1, tuvo el respaldo de elementos probatorios obtenidos por Policía Científica.
En aquel momento se encontraba en régimen de libertad vigilada por tres robos que había cometido unos meses antes. Carlos Facundo Enríquez, el 20 de marzo de 2020 hurtó en una finca de calle Uruguay, entre Las Piedras y Misiones, a la que ingresó mediante la rotura del candado de una puerta.
En la denuncia figuró el robo de dos bicicletas, una bordeadora, cañas de pescar y otros efectos. Uno de los birrodados fue encontrado poco más tarde abandonado en cercanías de la finca. El trabajo de los investigadores, desembocó en el allanamiento de la casa de Enríquez González, aunque fue detenido luego en la vía pública.
Aquella vez, la Justicia lo condenó a 6 meses de prisión efectiva y a otros 15 de libertad vigilada, como autor de tres delitos de hurto, dos de ellos agravados y uno en grado de tentativa, cometidos en distintos puntos de la ciudad de Piriápolis. Salió de la cárcel el 20 de septiembre de aquel mismo año.